Olinia, la nueva marca de carros mexicana: estos son los modelos con los que este país le apuesta a la producción automotriz

La industria automotriz continúa agitándose y cada día aparecen nuevos jugadores dentro del mercado que le apunta, cada vez más, a las nuevas tecnologías.

Justamente, el Gobierno de México anunció en las últimas horas la creación del primer fabricante de minivehículos eléctricos, bautizado como Olinia, con el objetivo de construir hasta tres modelos de coches ‘cero emisiones’ con precios que oscilen entre los 90.000 y 150.000 pesos (entre 19 millones y 32 millones de pesos colombianos), que llegarán al mercado en 2030.

El proyecto nace como una colaboración de inversión público-privada con el ánimo de fomentar la movilidad eléctrica en el país norteamericano con el lanzamiento de un coche destinado a la movilidad personal, otro para la movilidad “de barrio” y uno más para entrega de mercancías de última milla.

El Instituto Politécnico Nacional y el Tecnológico Nacional de México trabajarán con un capital inicial de 25 millones de pesos para desarrollar el modelo de vehículo definitivo que circulará por las carreteras del país a partir de la próxima década.

“Este auto pequeño debe ser seguro, eléctrico y capaz de conectarse a cualquier enchufe, además de contar con componentes mayoritariamente mexicanos”, aseguró la presidenta del país, Claudia Sheinbaum, durante la presentación del proyecto.

El sector de la automoción en México representa, según los últimos cálculos, hasta un 3,6 % del PIB total y el 18,7 % del PIB del sector industrial. Asimismo, genera alrededor de 1 millón de empleos formales y representa el 13,3% sobre el total de la inversión extranjera directa.

Este anuncio se da en medio de las dudas que hay sobre lo que podría ser una de las primeras órdenes ejecutivas del presidente electo de Estados Unidos una vez tome posesión de su cargo, y la cual podría ir encaminada a fijar aranceles a los carros que se importen desde Candá o México.

Al respecto, Sheinbaum insistió desde hace varios días en que Estados Unidos es un socio y no un competidor, motivo por el que ha abogado por mantener el tratado de libre comercio con el país vecino y con Canadá.

La mandataria expresó que la única manera de competir con otras regiones del mundo es mantener y fortalecer el tratado comercial, siendo esta su línea argumental de las últimas semanas, en especial desde que Trump, anunciase la imposición de aranceles a las importaciones de México y Canadá en cuanto llegue a la Casa Blanca.

“Más que vernos como competencia hay que verse como complemento”, aseguró Sheinbaum, quien también recordó que el tratado es mutuamente beneficioso tanto para México como para Estados Unidos, y ha recordado que fue el propio Trump, en su primer mandato, uno de los artífices de firmar este texto comercial.

Así, exhortó al próximo presidente estadounidense a “dejar el diálogo a través de los medios” y ha defendido la soberanía e independencia de México, a la espera de concretar una reunión con su equipo para evitar una política comercial más proteccionista por parte de la futura administración en Washington.

Son varias marcas, incluidas estadounidenses, las que tienen sus fábricas de producción de vehículos en territorio mexicano, razón por la que la industria está a la expectativa de lo que pueda suceder y de si tendrán que reajustar su línea de producción para sopesar los nuevos aranceles anunciados por Donald Trump.