54D: el duro, costoso y efectivo método de las celebridades para mantenerse en forma

Antes de la cuarentena, casi nadie había oído hablar de 54D. Aunque se trataba de un método usado por muchos en Estados Unidos, en Colombia el nombre sonaba muy lejano. Sin embargo, llegó el encierro y la cuenta de Rodrigo Garduño en Instagram comenzó a crecer a ritmos acelerados. Su cuenta llegó a un millón de seguidores y sus transmisiones eran seguidas por casi un estadio: 50.000 personas. Se trata de un entrenador de la “vieja escuela” que tiene un programa al que pocos se resisten: 54d.

“Sin equipo, sin luces, sin producción, solo mi teléfono y yo”, suele decir antes de comenzar cada entrenamiento. La rutina es realmente profesional y la hacen tanto deportistas entrenados, modelos, artistas y personajes comunes y corrientes desde las salas de sus casas. La revista Forbes acaba de hacerles un reportaje en el que cuentan los detalles de su éxito.

“De A-Rod a Adriana Lima, ¿por qué las celebridades se inscriben en 54D, un entrenamiento de $4.000 en Miami’”, se titula el artículo. En este se cuenta cómo el programa es seguido por estrellas que pagan cerca de 15 millones de pesos colombianos por seguir una rutina en la que obtienen resultados en apenas 54 días.

El artículo comienza contando una escena que demuestra el enorme compromiso que deben tener quienes se inscriben en el programa: no faltar nunca. El día de la posesión de Joe Biden como presidente, uno de los invitados era Alex Rodríguez, un exjugador de los Yankees, pareja de Jennifer López. “Nunca pensé que fuera a llegar a entrenar, pero lo hizo”, cuenta Garduño a Forbes.

“Desde la supermodelo Adriana Lima hasta los cantantes latinos Juanes, Fonseca y Carlos Vives, 54D es un quién es quién entre las celebridades amantes del fitness que se han unido o completado el “programa de transformación humana”, resalta Forbes. El canal RCN, en un reportaje que le hizo a Garduño, también cuenta que miembros de la Selección Colombia como James Rodríguez, Juan Guillermo Cuadrado y Juan Fernando Quintero usan ese método.

El programa tiene una particularidad y es que dirigido por exjugadores profesionales de fútbol. Hay 24 entrenadores en total. “Llevan 15 años en estadios lidiando con la presión, construyendo resistencia y saben cómo manejar grupos”, dice Garduño, quien fue futbolista del Necaxa. Garduño se retiró a los 29 años de esa profesión, en la que a esa edad uno ya comienza a ser considerado viejo. Y el no saber qué hacer, lo hizo “reinventarse” e inventarse uno de los mejores modelos de entrenamiento que existen ahora.

No se trata solo de un programa físico, sino que combina la ayuda nutricional y también la mental. Muchas personas aseguran haber superado episodios de depresión gracias a seguir esas rutinas y a la satisfacción que da cumplir con el entrenamiento.

El entrenamiento dura igual que su nombre: 54 días. “Solo descansamos los domingos”, dice Garduño. “Es un programa de transformación humana, no se trata solo de grasa y músculo”, le cuenta a la revista Forbes.

La otra innovación del programa es el sentido de comunidad. Garduño cree en el trabajo en equipo y asegura que las personas solo pueden lograr sus metas físicas si están haciendo ejercicio con otros. “Siempre vienen y piden clases privadas y no importa quién eres, tienes que venir con otros 30 seres humanos que comienzan el programa exactamente en la misma línea de salida y con las mismas reglas”, le explicó a Forbes.

Las reglas son muy estrictas. No se puede faltar a las sesiones y si una persona tiene tres ausencias la expulsan del programa y le devuelven la plata, pues se considera que el compromiso es la base fundamental para que la rutina tenga éxito. Así mismo, tampoco se puede llegar tarde. Y entrar tan solo tres minutos después, ya hace que también la persona sea expulsada de la clase.

Las cifras del programa son enormes y gracias a su éxito se ha convertido en un negocio admirado. Presencialmente cuesta 3.900 dólares, pero existen programas virtuales que cuestan 385 dólares (un poco más de un millón de pesos”. Forbes estima que los ingresos de 54D hoy están alrededor de 8 millones de dólares y que sus miles de alumnos están repartidos en 75 países.

“No importa si eres un atleta o apenas un jugador en clase”, dice Garduno. “Es la humildad y la dedicación lo que vale”, agrega a Forbes. Para él, el deporte realmente lo que genera al final es la sensación muy gratificante de pertenecer a una gran familia.