Vida Moderna
Aceite de jengibre: ¿cómo usarlo para cerrar poros y eliminar exceso de grasa?
La piel necesita varios cuidados específicos para lucir saludable, por ejemplo, seguir una dieta adecuada.
La piel es el órgano más grande del cuerpo y el cuidado de esta forma parte de la rutina de muchas personas en el mundo. Por ende, elegir un estilo de vida saludable puede ayudar a retrasar el envejecimiento natural y prevenir diversos problemas de la piel, según Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Además, las personas recurren a productos cosméticos o técnicas quirúrgicas para cerrar poros y eliminar exceso de grasa, pero el portal Mejor con Salud reveló que el aceite de jengibre ayuda con dichas afecciones, ya que el alimento tiene propiedades antibacterianas, antioxidantes y cicatrizantes.
En consecuencia, para prepararlo se debe rallar jengibre fresco y se debe agregar en aceite de oliva. Después se lleva al horno por dos horas y por último se cuela la mezcla en un recipiente de vidrio y se usa.
Hay que señalar que el jengibre tiene otros beneficios, como por ejemplo, es utilizado por las personas que sufren de problemas digestivos como la gastritis, estreñimiento, entre otros, ya que funciona como un protector estomacal.
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Adicionalmente, es consumido por las mujeres que sufren de cólicos o dolores menstruales, ya que reduce el dolor y puede resultar ser más efectivo que un medicamento.
De igual forma, es conocido por reducir los niveles altos de lipoproteínas LDL en la sangre.
El jengibre, al contener componentes antioxidantes, podría mejorar la función cerebral de manera directa, lo cual ayudaría contra el alzhéimer. Asimismo, la planta ayuda a disminuir la disfunción cerebral relacionada con la edad.
Por su parte, la piel tiene varios cuidados específicos para que esta luzca brillante y saludable, y las recomendaciones son:
1. Utilizar productos adecuados, pues en muchas oportunidades la publicidad que se le realizan a los productos de belleza suele ser tentadora, pero no siempre los productos son los ideales para todo tipo de piel y hay que saber cuál es el tipo de piel de cada persona.
2. Tener constancia, ya que la gran mayoría de personas cuando inician un tratamiento físico, fácil o corporal quieren ver resultados rápidos y al no obtenerlos abandonan el tratamiento y la única forma de ver resultados es siendo constantes.
3. Realizar limpieza facial, ya que es una práctica que pocas personas realizan, pero es necesaria para el cuidado de la piel, ya que con esto se eliminan impurezas del rostro y este proceso se debe realizar en las mañanas y en las noches. Además, es importante utilizar una toalla que sea de uso exclusivo para el rostro.
4. Hidratarse, pues el agua mejora la salud de la piel y hace verla mas hidratada y reluciente. No obstante, el consumo diario de este líquido es diferente para los hombres y para las mujeres y también depende de las actividades que se realicen día a día como, por ejemplo, si la persona hace ejercicio debe consumir más agua para cubrir la pérdida de líquidos.
5. Exfoliarse, ya que este proceso es vital para mantener los poros limpios.
6. Usar protección solar, pues la luz solar es una causa importante del envejecimiento de la piel. Por esa razón los expertos recomiendan que las personas que diariamente se exponen al sol deberían usar protector solar los 365 días del año, sobre todo durante los periodos de verano, pero también es importante proteger a la piel fuera del verano.
7. Seguir el orden adecuado de los productos, pues en la cosmética esto sí afecta el resultado. En general, los productos más ligeros van primero. Por ejemplo, se inicia con la limpieza, después va el tónico, el contorno de ojos, el sérum, la crema hidratante, la protección solar y, por último, el maquillaje.