SALUD
Aceite de laurel: cómo prepararlo y cuáles son sus beneficios
El laurel puede funcionar en el manejo del estrés.
El laurel es una planta mediterránea que tiene muchas propiedades, cuyo nombre científico es Laurus nobilis. Sus hojas son alargadas y perennes, suelen estar acompañadas de flores con tonalidades blanquecinas y amarillentas, con bayas oscuras. Además, puede llegar a alcanzar casi 12 metros de altura.
De acuerdo con un estudio publicado en la revista Food Chemistry, previene la acidez y la formación de gases por las sustancias que contiene. Asimismo, tiene propiedades bactericidas, antisépticos, expectorantes y antiinflamatorios. También, es ideal para reducir el ácido úrico y contribuir en el tratamiento de las personas con diabetes. Esta última cualidad se debe a que las hojas de laurel parecen mejorar la insulina, según una investigación publicada en Journal of Clinical Biochemistry and Nutrition, citada por la revista española sobre buenos hábitos y cuidados para la salud MejorConSalud.
Sobre la misma línea, el laurel es bueno para regular el flujo menstrual y actúa como un estimulante en casos de fatiga, ya que reactiva el tono muscular. Adicionalmente, alivia las infecciones bucales, reduce el estrés y la ansiedad y también es antirreumática.
El laurel es aprovechado en diferentes presentaciones. La culinaria es uno de los oficios que más emplea el laurel para darle sazón a las comidas y aportar todos sus beneficios a los comensales, mientras que otro centenar de personas toman hojas de laurel para preparar una infusión de esta planta y aliviar dolencias.
Un tercer uso es mediante el aceite de laurel, ampliamente utilizado en la aromaterapia como relajante muscular y descongestionante, así como en el campo de la belleza y la cosmética, donde aporta beneficios tanto para la piel como para el cabello.
El aceite de laurel ayuda a controlar la caída del cabello, siendo esta una de las propiedades más prominentes, según destaca el portal especializado Aceites Vegetales. Sumado a lo anterior, el aceite de laurel previene la caspa, le aporta brillo a las fibras capilares y ayuda a ahuyentar a los piojos que suelen formarse en la cabeza.
En lo que refiere a la piel, este aceite esencial ayuda a evitar el resurgimiento del acné debido a propiedades antisépticas, antimicrobianas y antiinflamatorias ya mencionadas. Además, los antioxidantes presentes en el laurel le hacen bien a la piel. Es importante advertir que su uso en la piel debe ser moderado, pues el eugenol contenido en el aceite esencial puede causar irritaciones; lo mejor es consultar a un médico previo a su uso.
Pueden mezclarse tres gotas de aceite esencial de laurel con tres gotas de aceite de almendra y aplicarlas en la zona del ombligo, realizando masajes circulares. Esta sencilla preparación calmará el estrés.
Este aceite esencial se obtiene a través de un proceso de destilación y vaporización de las hojas, logrando una disolución líquida de color amarillo. Así como se puede encontrar en diferentes establecimientos de comercio, el aceite de laurel también puede ser preparado en casa, cumpliendo unos cuantos pasos.
Los ingredientes que se necesitan son dos: 30 gramos de hojas de laurel frescas y un litro de aceite de oliva virgen extra o de almendras dulces. A la par, se deben alistar un frasco de cristal con cierre hermético y una gasa para colar.
En primer lugar, se debe proceder con la limpieza de las hojas de laurel, para después triturarlas tanto como se pueda y verterlas en el frasco de cristal. Luego, se agrega el aceite al frasco, se revuelven los ingredientes y se dejan macerando durante dos semanas, removiendo la preparación cada dos días.
Cumplido el tiempo en mención, se cuela la mezcla y se agregan 30 gramos nuevos de hojas de laurel para intensificar el aroma. Esta preparación debe dejarse macerando durante otras dos semanas, revolviéndola cada dos días, nuevamente. Cuando se cumpla el tiempo, se cuela la preparación y estará listo para su uso.