Vida Moderna
Aceite de oliva para reducir el dolor de rodilla y la inflamación: así se prepara
Los ejercicios acuáticos ayudan a calmar los síntomas que producen afecciones como la artritis.
El dolor de rodilla es más común de lo que parece y se evidencia luego de realizar ejercicio o de hacer un mal movimiento, por ejemplo.
Una persona con artritis y/o sobrepeso es más propensa a sufrir un dolor de rodillas. Aunque la molestia puede aliviarse adoptando ciertos hábitos, no debe ser pasada por alto, por lo que se recomienda consultar con un profesional de la salud.
Es entonces que descansar es una de las actividades indispensables para cuando se sufre esta afección. Asimismo, aplicar hielo en la rodilla y elevarla para reducir la inflamación, explica la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus.
Otro consejo de la entidad americana para contrarrestar este síntoma es dormir con una almohada entre las rodillas.
Tendencias
Lo anterior no reemplaza las indicaciones de un médico.
¿Cómo prevenir una lesión en la rodilla?
MedlinePlus señala algunas prácticas que reducen las probabilidades de sufrir un dolor de rodilla. Sin embargo, no significa que eliminen el riesgo:
- Tener una dieta balanceada: la obesidad y/o el sobrepeso inciden en los dolores de rodilla porque las articulaciones deben soportar más peso. Por esto, es importante mantener un plan de alimentación balanceado, siempre diseñado por un nutricionista.
- Hacer ejercicio: si bien es cierto que tener rutinas físicas son vitales para la salud, sin importar los problemas de salud que una persona tenga, no todos son aptos. Por ejemplo, a una persona con artritis no se le recomienda correr porque esta actividad impacta de manera negativa la rodilla por la fricción con el suelo, es entonces que los ejercicios acuáticos son los ideales en el tratamiento de estas afecciones.
- El precalentamiento y los estiramientos deben ser primordiales para evitar lesiones musculares también.
- Tanto el uso de zapatos adecuados como el de plantillas también contrarrestan este dolor.
Aunque son muchas las sugerencias que una persona puede seguir para calmar este síntoma, algunos remedios caseros pueden ayudar aliviarlo, como el uso de aceite de oliva.
El aceite de oliva
Este aceite es uno de los más predilectos en la cocina y en la dieta mediterránea, explica Tua Saúde, gracias a sus propiedades antioxidantes y vitamina E, que según el sitio web tiene la capacidad de:
- Reducir el colesterol: que, de acuerdo con la Clínica Mayo, “es una sustancia cerosa” que se adhiere a las paredes de las arterias, inhabilitando el paso de la sangre.
- Reducir las posibilidades de riesgos de padecer diabetes tipo II, que consiste en la resistencia que tienen las células ante la insulina, una hormona que ayuda a ingresar la glucosa en ellas.
- Prevenir cáncer: más que prevenir el cáncer, el aceite de oliva, al ser incluido en una dieta balanceada, puede ser útil para disminuir muchas afecciones, entre ellas, el cáncer. Lo que no quiere decir que elimine los factores de riesgo, sino que los reduce.
- Regular la presión arterial: la Clínica Mayo señala que la presión arterial alta es la “fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de tus arterias”, que puede traer complicaciones sobre el corazón.
Remedio casero para aliviar la inflamación
Mejor con Salud señala que el aceite de oliva, al tener propiedades antioxidantes, puede ayudar a desinflamar esta zona, por lo que, con la ayuda de cáscaras de limón y hojas de eucalipto, sería una de las mejores soluciones.
- En un frasco de vidrio agregar las cáscaras, las hojas trituradas y aceite.
- Conservar en un lugar fresco por aproximadamente dos semanas.
- Colar y aplicar.
El sitio web aconseja humedecer una gasa y cubrir con vinipel la rodilla, dejándola actuar toda la noche. Repetir este ejercicio varias veces en la semana. Es importante antes de llevar a cabo cualquier remedio consultar con un profesional de la salud.