Aceite de oliva: tres formas de usarlo para reducir arrugas y rejuvenecer la piel

En la despensa del hogar existen muchos alimentos que pueden ser utilizados para el cuidado de la piel. Algunos de los más comunes son la sábila, el bicarbonato de sodio, la miel y el pepino.

El aceite de oliva también es un aliado perfecto para la salud de la piel. El portal Gastrolaweb resalta los beneficios de este y cómo puede utilizarse de diversas formas.

Hidratación intensa

El aceite de oliva es una buena opción para brindar hidratación a zonas de la piel que sean demasiado secas. De acuerdo con el sitio web, este producto aporta beneficios a la salud cutánea, gracias a su contenido alto de ácidos grasos naturales y vitaminas E y K, las cuales ayudan a conservar la elasticidad natural de la piel.

Cabe resaltar que no es recomendable la aplicación de este producto en cutis que sean muy grasos. Por ello, se aconseja consultar al dermatólogo antes de realizar este tipo de tratamiento.

Mascarilla antiedad

Las propiedades del aceite de oliva tienen efectos positivos en la piel. Según destaca el sitio web se pueden aprovechar para preparar una mascarilla antiedad, la cual ayuda a la reparación de los tejidos de la piel.

Desmaquillante

Desmaquillarse es uno de los factores más importantes para el cuidado de la piel. Algunas personas cometen el error de evitarlo, especialmente al momento de dormir. La acumulación de maquillaje y de restos de él contribuye a la formación de ojeras y arrugas.

El portal explica que el aceite de oliva funciona como un buen desmaquillante, especialmente para los ojos. Para utilizarlo se debe tomar algodón y mojarlo un poco con el producto. Igualmente, “el aceite de oliva virgen extra puede ayudar a reducir las arrugas, sobre todo las que se forman debajo de los ojos con este procedimiento”, explica Gastrolaweb.

Automasaje facial

Mejor con Salud, portal especializado en bienestar y cuidado corporal, explica que se pueden realizar masajes enfocados en la zona de los ojos para mejorar la prominencia de las arrugas y lucir un rostro joven. Se pueden realizar diariamente para obtener buenos resultados.

• Parpadear muchas veces seguidas y cerrar fuertemente los ojos. Luego, relajarlos.
• Realizar movimientos circulares con la yema de los dedos suavemente en la zona interna de las cejas. Luego, seguir hacia la parte externa de la ceja. Continuar con el contorno y finalizar en el inicio de la ceja.
• Frotar fuertemente las manos para calentarlas y poner las palmas de las manos en los ojos cerrados.

¿Cómo prevenir las arrugas y lucir joven?

Para evitar la alta prominencia de arrugas y flacidez en la piel es importante ayudar al cuerpo a producir colágeno.

La estimulación de la producción de colágeno puede hacerse de manera natural. El portal Salud 180 menciona varias formas para hacerlo.

1. Alimentación balanceada

Cuidar la alimentación es una de las principales claves para cuidar el aspecto de la piel. Una dieta balanceada, además de contribuir con ello, beneficia todo el cuerpo. Por esto, es relevante incluir en las comidas nutrientes que ayuden a la producción de colágeno como los aminoácidos glicina (gelatina) y prolina (huevos y lácteos).

2. Evitar exposiciones dañinas

Para estimular la producción de colágeno se deben contrarrestar los factores que dañan la piel. Se debe evitar exponerse a los rayos ultravioleta y a contaminantes como el humo de cigarrillo, ya sea de forma directa o indirecta.

3. Dormir

Descansar al menos ocho horas es lo que ayuda a que el cuerpo se recupere y repare. Al dormir, el cuerpo continúa trabajando y se concentra en la producción de colágeno.

4. Hacer ejercicio

El entrenamiento y la actividad física ayudan a que el cuerpo mejore su circulación sanguínea y sintetice la producción de colágeno. De igual manera, estimula la producción de la hormona de crecimiento, la cual afecta de forma positiva el proceso de creación de colágeno y elastina.

5. Realizar masajes

Las mascarillas de aloe vera son una gran ayuda para el cuidado de la piel. Aportan hidratación y reducen la aparición de arrugas faciales.