Vida Moderna
¿Cómo preparar el agua de jengibre para reducir el colesterol, el azúcar y regular la presión arterial?
Cuando se consume en exceso, el jengibre puede causar dolor de estómago.
El jengibre, cuyo nombre científico es Zingiber officinale, es una planta con propiedades medicinales y puede usarse de diferentes formas –en polvo, en aceite o zumo– y en la cocina es un gran ingrediente para algunos platos.
De hecho, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que el tallo del jengibre puede adquirirse en tiendas de productos naturales y supermercados en su forma natural, deshidratado o en polvo.
Asimismo, el portal indicó que el jengibre “posee propiedades anticoagulantes, vasodilatadoras, expectorantes, analgésicas, digestivas, antiinflamatorias, antieméticas, antitusivas, astringentes, carminativas, antipiréticas y antiespasmódicas”.
Entre tanto, señaló que “por contener zingibereno, gingerol y curcumeno, que son compuestos fenólicos con potente acción antioxidante, el jengibre ayuda a proteger las células del páncreas contra los radicales libres, manteniendo los niveles adecuados de insulina y evitando, de esta forma, la resistencia a la insulina y la diabetes”.
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Sobre la misma línea, explicó que “el jengibre posee propiedades relajantes, antiinflamatorias, antioxidantes, vasodilatadoras y anticoagulantes, las cuales mejoran la elasticidad y la relajación de las arterias, lo que facilita la circulación y ayuda a equilibrar la presión alta”.
Además, “el jengibre inhibe la enzima convertidora de angiotensina, que es responsable por la contracción de los vasos sanguíneos, evitando así el aumento de la presión arterial”. De igual manera, es ideal para reducir el colesterol por los antioxidantes que disminuyen el exceso de radicales libres, impidiendo la oxidación de las células de grasa.
“El jengibre contiene compuestos antiinflamatorios que inhiben la formación de placas de grasa en los vasos sanguíneos, mejorando la circulación de la sangre y previniendo enfermedades como infarto, aterosclerosis y derrame”, añadió Tua Saúde.
No obstante, aunque tiene varios beneficios, existe un grupo de personas que no debería consumir la planta, según La Prensa Gráfica, y en ese grupo están incluidas las personas con bajo peso, pues sus componentes logran acelerar el metabolismo y un bajo peso puede ocasionar problemas en la salud.
Asimismo, las mujeres durante su periodo deben reducir su consumo, ya que es vasodilatador y eso podría aumentar el sangrado, aunque reduzca el dolor menstrual y resulte ser más efectivo que un medicamento.
De igual modo, el periódico señaló que las personas con enfermedades cardíacas deben evitar su consumo en exceso, porque “puede generar problemas cardíacos como arritmias o, en casos extremos, infarto”.
Adicional, no es recomendada por mujeres embarazadas, en especial si están en la última etapa de la gestación, y tampoco es bueno consumir la planta si se usan fármacos para la hipertensión, pues “bloquea los canales de calcio”.
Sobre la misma línea, el portal Bienestar de Colsanitas indicó que “no es recomendado en altas dosis para personas que padecen de problemas en los riñones debido a que contiene oxalatos (los cuales originan los cálculos renales)”.
Dicho lo anterior, para preparar el agua de jengibre hay que hervir 180 ml de agua y agregar de dos a tres cm de jengibre fresco rallado. Otra forma, es hervir un litro de agua y añadir una cucharada de jengibre en polvo.
De todos modos, antes de consumir algún alimento lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Información nutricional por 100 gramos de jengibre
- Calorías: 80
- Grasas totales: 0,8 gramos.
- Ácidos grasos saturados: 0,2 gramos.
- Sodio: 13 miligramos.
- Potasio: 415 miligramos.
- Hidratos de carbono: 18 gramos.
- Fibra alimentaria: 2 gramos.
- Azúcares: 1,7 gramos.
- Proteínas: 1,8 gramos.
- Vitamina C: 5 miligramos.
- Calcio: 16 miligramos.
- Hierro: 0,6 miligramos.
- Vitamina B6: 0,2 miligramos.
- Magnesio: 43 miligramos.
Hábitos saludables para reducir el colesterol, el azúcar y regular la presión arterial
1. Tener una dieta saludable: esta debe incluir al menos 400 g (o sea, cinco porciones) de frutas y hortalizas al día, menos del 10 % de la ingesta calórica total de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria procedente de grasas y menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.
2. Realizar actividad física: las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos.
3. Reducir el consumo de alcohol: la recomendación es una bebida diaria si se es mujer y dos bebidas diarias si se es hombre.
4. Tomar agua: este líquido acelera el metabolismo, genera saciedad y adicional hidrata el cuerpo. No obstante, de acuerdo con Mayo Clinic, el consumo diario de agua es diferente para los hombres y para las mujeres, ya que existen diferencias entre la ingesta, pero por lo general los hombres deberían consumir 3,7 litros de agua al día y las mujeres deberían beber 2,7 litros.