El consumo de aguacate le aporta grasas saludables al organismo. Foto: Getty Images
El consumo de aguacate le aporta grasas saludables al organismo. Foto: Getty Images | Foto: Getty Images

Alimentación Sana

Aguacate: así se debe consumir para reducir el colesterol malo

Este alimento ayuda a eliminar del cuerpo aquellas grasas nocivas que inciden en un riesgo de infarto o sobrepeso.

8 de octubre de 2022

Luchar contra el sobrepeso, la mala alimentación y cambiar los patrones de consumo para dejar atrás las grasas saturadas y abrir espacio a aquellas que sí le hacen bien al cuerpo es una de las luchas más grandes que se están dando por parte de los médicos y nutricionistas hoy en día. Esto con el fin de reducir la aparición de enfermedades cardiovasculares y generar conciencia sobre la importancia de comer bien.

En todo esto hay una palabra clave, que es el colesterol, una sustancia cerosa que el cuerpo requiere para gozar de buena salud, pero en las cantidades adecuadas. Cuando sus niveles se elevan, es posible que se acumulen depósitos en las arterias poniendo en riesgo la salud del corazón, según el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre, de Estados Unidos.

Con el tiempo, estos depósitos crecen y hacen que sea más difícil el flujo suficiente de sangre a través de los vasos sanguíneos. También en ocasiones estas placas pueden romperse y formar un coágulo que causa un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular. Es por esto que preferiblemente se debe recurrir a las grasas naturales y evitar aquellas que surgen luego de largos procesos de producción.

Un ejemplo de aquellas grasas que sí le ayudan al cuerpo es la que viene en el aguacate, conocido también en otros países como palta. Según los expertos, este fruto carnoso, de tonalidades verdes externas que son de pulpa verde pálida o amarillenta, y textura y sabor suaves, puede reemplazar, por ejemplo, a la mantequilla o la margarina, los cual son un derivado de la leche y los aceites vegetales.

Según el portal Mejor con Salud, la semilla del aguacate contiene varios fitoquímicos, entre los que destacan los fenoles totales, oxalatos, alcaloides, flavonoides, taninos y saponinas. Asimismo, es rica en vitaminas A, B1, B2, B3, C, E. Además, contiene proteínas, grasas, fibras y carbohidratos, los cuales son esenciales para el organismo.

¿Cómo consumirlo para bajar el colesterol?

De acuerdo con una investigación de el Journal of the American Heart Association, comer un aguacate al día no reduce la grasa abdominal, la grasa hepática o la circunferencia de la cintura en personas con sobrepeso u obesidad, pero sí disminuye los niveles de colesterol LDL o colesterol malo.

Para comprobar el impacto del aguacate en la salud, los investigadores realizaron un experimento de seis meses en el que participaron más de mil personas con sobrepeso u obesidad. A la mitad se les indicó que comieran un aguacate todos los días, mientras que la otra mitad continuó con su dieta habitual y se les dijo que limitaran su consumo de aguacate a menos de dos al mes.

Al revisar los resultados luego del periodo analizado, observaron que el grupo que había comido un aguacate al día había obtenido una disminución del colesterol total de 2,9 miligramos por decilitro (mg/dL) de sangre y una disminución del colesterol LDL o malo de 2,5 mg/dL.

Según los expertos, este producto puede ser consumido en ensalada, como mantequilla, en batido y directamente, una vez se retira la cáscara. Incluso se ha mencionado que la semilla del aguacate podría regular los niveles del colesterol malo en la sangre, al tiempo que aumenta los niveles del colesterol bueno, lo que lleva a disminuir el desarrollo de enfermedades cardiovasculares.

El aguacate es calórico porque, a diferencia de otras frutas, su contenido en agua es menor mientras que su aporte de lípidos es elevado. Contiene 141 kcal por 100 g de alimento (una pieza pesa 200 g aprox.)

Las grasas que contiene son en su mayor parte insaturadas (monoinsaturadas), destacando en particular el elevado contenido en ácido oleico. Solo un 15 % de sus grasas son saturadas y no aporta nada de colesterol. También es fuente de minerales como el potasio (contiene un 60 % más que un plátano mediano) y de magnesio. Además, aporta poco sodio, por lo que se aconseja para hipertensos.