Vida Moderna
Ajo: así se debe preparar para perder peso y adelgazar el abdomen
El ajo también reduce la necesidad de oxígeno de algunos hongos, lo que ralentiza su crecimiento.
El ajo es conocido porque tiene varias propiedades curativas y por eso hace parte de muchos remedios caseros. Hasta ahora no hay una evidencia científica que demuestre que el mejor momento para consumir el ajo sea en las mañanas o antes de ir a dormir. Lo que sí se sabe es que su consumo regular puede ayudar al fortalecimiento del sistema inmunológico y beneficiar al organismo de otras maneras.
Según el portal Cocina Recetas Fáciles, el ajo también cuenta con beneficios increíbles para perder peso, con lo que logrará depurar su organismo, acrecentar la movilización de grasas, reducir su colesterol, controlar la glucemia y reducir los triglicéridos.
La página especializada asegura que la infusión de ajo ayuda a desintoxicar nuestro organismo y, como consecuencia, actuar directamente en la pérdida de peso, además de que ayuda a aumentar la serotonina en el cerebro disminuyendo estrés y ansiedad.
También narra la publicación de Cocina Recetas Fáciles que con este beneficioso té, se podrá complementar una dieta hipocalórica, logrando resultados más efectivos y rápidos, mientras que su consumo en ayunas es bueno para los riñones y vejiga pues combate parásitos intestinales.
Además, un estudio publicado por la Universidad de Gezira, de Sudán, señala que el ajo controla el azúcar en la sangre, lo que ayuda a adelgazar y es muy beneficioso para aquellos que sufren diabetes. Igualmente, este alimento favorece la correcta digestión de los alimentos, lo que también puede ayudar a mantener un buen peso.
Otros beneficios del ajo
El portal Healthline destaca que es un alimento con un alto aporte nutricional y muy pocas calorías. Se le reconoce porque, gracias a sus componentes, ayuda a aliviar infecciones respiratorias, dilata los bronquios, estimula el sistema inmunológico y es un gran desintoxicante para el organismo.
Aunque el consumo de este alimento no garantiza que las personas no se enfermen o que su estado de salud sea perfecto, los expertos recomiendan incluirlo en la dieta para aprovechar sus beneficios.
De acuerdo con el portal especializado en salud Tua Saúde, el ajo tiene múltiples bondades para el cuerpo humano: Como combatir virus, bacterias y hongos ya que el ajo se compone de alicina, sustancia que funciona como antimicrobiano, inhibiendo el crecimiento y la multiplicación de las bacterias, virus y hongos.
El consumo de ajo disminuye igualmente el riesgo de padecer problemas de presión arterial, de acuerdo con un estudio publicado en la revista científica Molecular and Cellular Biochemistry. Esto debido a que ejerce un efecto hipotensor y favorece la circulación de la sangre, gracias a un efecto vasodilatador.
¿Cómo preparar una infusión de ajo?
Ingredientes
- 1 vaso de agua (200 ml)
- Miel (21 g)
- 1 diente de ajo
- Jengibre rallado (3 g aproximadamente)
- 1 cucharada de jugo de limón (15 ml)
Preparación
- En una olla, colocar la cantidad indicada de agua a hervir.
- Entre tanto, cortar el ajo en pedazos pequeños o trozos grandes, a su preferencia, para optimizar sus propiedades durante la cocción.
- Cuando hierva el agua, se debe añadir el jengibre rallado y el ajo que se cortó en el paso anterior. Revolver un poco y dejar cocer por 15 o 20 minutos.
- Luego de este tiempo, se debe apagar el fuego y dejar reposar la infusión en la olla durante unos 10 minutos más.
- Después, colar y reservar el agua de la cocción.
- Agregar a esta bebida el zumo de limón.
Para endulzar, se puede agregar un poco de miel al gusto. Hay que tener en cuenta que esta bebida no tiene un sabor muy agradable, por lo que la miel puede ayudar a atenuarlo.
Finalmente, un estudio realizado por investigadores del Instituto de Toxicología de la Universidad de Shandong (China), llevaron a cabo un metaanálisis que analizó 26 trabajos previos en el que evaluaron los efectos del ajo sobre los niveles de colesterol.
En general, el ajo fue superior al placebo en la reducción de colesterol sérico total (CT) y triglicéridos (TG). Los resultados apuntan que los efectos del ajo fueron más marcados en personas con un tratamiento a largo plazo.