VIDA MODERNA
Ajo: así se puede consumir para prevenir la fatiga y combatir la gripe
El ajo se debe involucrar de manera moderada en la dieta.
El ajo es un alimento que se usa de manera frecuente para condimentar y para darle un mejor sabor a algunas preparaciones; incluso algunas personas que no consumen sal o que la evitan, hacen uso de esta especia para reemplazarla.
Este alimento se caracteriza por tener un olor fuerte y un sabor amargo; y más cuando se consume solo y sin acompañar alguna preparación. El portal de salud, belleza y cuidado personal Cuídate Plus menciona algunas de las propiedades de este alimento.
En el artículo escrito por la periodista Ana Callejo Mora, se menciona que el ajo hace parte de lo que hoy en día se conoce como dieta mediterránea; esta incluye proteínas magras, en especial el pescado, contiene frutas, verduras, granos integrales y para cocinar se emplea el aceite de oliva extra virgen.
“El ajo es una planta de la misma familia que la cebolla, los puerros y las chalotas. Es cultivado en amplias zonas del mundo y muy utilizado en la cocina”. El medio habló con Miguel Ángel Martínez Olmos, miembro del área de nutrición de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), para conocer detalles acerca de las propiedades nutricionales de este producto.
Tendencias
El profesional de la salud Martínez mencionó que el ajo negro tiene más propiedades que el blanco; sin embargo, los dos tienen un alto contenido de vitamina C, por ende, este alimento puede prevenir la gripe y otras enfermedades, ya que fortalece el sistema inmune.
“El ajo contiene cantidades significativas de algunos micronutrientes como el manganeso, la vitamina B6, la vitamina C y el selenio, y es bajo en calorías. Es rico en polifenoles y otras sustancias antioxidantes, que aumentan más en el ajo negro (obtenido a través de una transformación del ajo blanco a temperatura y humedad constantes)”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) menciona la manera correcta de consumir este alimento para obtener todos sus beneficios. Una dosis diaria de 2 a 5 g de ajo fresco (aproximadamente un diente de ajo), de 0,4 a 1,2 g de ajo en polvo seco, de 2 a 5 mg de aceite de ajo, de 300 a 1.000 mg de extracto de ajo, u otras formulaciones equivalentes de entre 2 y 5 mg de alicina.
Beneficios de involucrar el ajo en la dieta
El portal de cuidado personal y belleza Mejor con Salud brinda la lista de afecciones que puede tratar y prevenir el ajo.
- Reduce los niveles de colesterol en la sangre: algunos profesionales de la salud recomiendan que las personas que sufren de esta afección involucren el ajo en su plan de alimentación, gracias a sus propiedades hipotensoras e hipolipemiantes que mejoran la circulación sanguínea reduciendo los niveles excesivos de este lípido en la sangre.
- Combate y previene enfermedades de origen viral: se cree que este producto contiene un elemento que combate los patógenos que ocasionan una infección viral en el organismo; además, gracias a que contiene vitamina C se considera que, también, previene cierto tipo de afecciones, entre ellas, la gripe.
- Mejora el rendimiento: “la Fundación Española de la Nutrición indica que en la Antigüedad, el ajo se usaba para reducir la fatiga y aumentar las capacidades de los trabajadores (en términos de fuerza y resistencia)”, por ende, este alimento puede mejorar las condiciones físicas y mentales de una persona cuando se acompaña de buenos hábitos.