Salud
Ajo: tres formas de usarlo para controlar la presión arterial alta
Apenas uno de cada cinco adultos hipertensos tiene controlado el problema, según la OMS.
La presión arterial alta (hipertensión) es una afección frecuente en la que la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias con el transcurso del tiempo es lo suficientemente alta como para causar problemas de salud, como una enfermedad cardíaca, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Las lecturas de la presión arterial generalmente se dan como dos números: el número superior se denomina presión arterial sistólica, el número inferior se llama presión arterial diastólica, por ejemplo, de 120 sobre 80 (escrito como 120/80 mm Hg).
En consecuencia, la biblioteca explicó que se mide de la siguiente forma:
- Una presión arterial normal es menor a 120/80 mm Hg la mayoría de las veces.
- Una presión arterial alta (hipertensión) es mayor a 130/80 mm Hg la mayoría de las veces.
- Si el número superior de la presión arterial está entre 120 y 130 mm Hg y el número inferior es menor a 80 mm Hg, se denomina presión arterial elevada.
También indicó que hay muchos factores que pueden afectar la presión arterial, como la cantidad de agua y de sal que tiene el cuerpo de cada persona, el estado de los riñones, el sistema nervioso, los vasos sanguíneos y los niveles hormonales.
Tendencias
Además, una persona tiene un riesgo más alto de sufrir hipertensión arterial si es afroamericano, es obeso, con frecuencia está estresado o ansioso, toma demasiado alcohol (más de un trago al día para las mujeres y más de dos al día para los hombres), consume demasiada sal, tiene un antecedente familiar de hipertensión arterial, tiene diabetes o si fuma.
Por tal razón, el portal Salud 180 reveló tres formas de usar el ajo para controlar la presión arterial alta.
1. Pelar y partir por la mitad 20 dientes de ajo e introducirlos en un recipiente de vidrio con un litro de aceite de oliva extra virgen. Después, dejar reposar tres días y después se debe consumir un ajo diario en ayunas.
2. Tomar un vaso de agua con dos dientes de ajo en ayunas.
3. En un frasco de vidrio agregar diez ajos pelados y partidos por la mitad con 350 gramos de miel y el jugo de un limón. La mezcla se debe dejar reposar por una semana y después de ese tiempo diariamente en ayunas se come una cucharada.
No obstante, al igual que con cualquier alimento que se quiera incluir en la dieta diaria, es importante consultar al médico tratante o a un nutricionista sobre cuál es la mejor manera de consumir, y si las condiciones médicas ya existentes no son un impedimento para beneficiarse de todas las propiedades del alimento ya nombrado.
Otros beneficios del ajo
El consumo de ajo es beneficioso, pues la revista médica Diabetes, Metabolic Syndrome and Obesity publicó un estudio en el que se determinó que los pacientes diabéticos que consumían ajo en ayunas para complementar su respectivo tratamiento mostraron una reducción considerable de sus niveles de glucosa.
Adicionalmente, la revista médica Journal of Medicinal Food publicó una investigación en la que se evidencia que el ajo puede combatir los procesos de inflamación, pues incorpora elementos como el disulfuro de dialilo, que sirven para tratar de manera natural la artritis.
Sin embargo, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, es importante reducir la ingesta de ajo en personas con problemas estomacales o digestivos, ya que podría llegar a producir irritación del tracto gastrointestinal.
Medline Plus también advierte que el ajo, especialmente fresco, podría aumentar el sangrado. Por ello, recomiendan dejar de tomarlo al menos dos semanas antes de un procedimiento quirúrgico. Asimismo, los pacientes sometidos a tratamiento anticoagulante deben vigilar su consumo, ya que puede elevar el riesgo de sangrado.