VIDA MODERNA
Al estilo de Star Wars, descubren sistemas planetarios de dos soles que podrían tener vida
Los sistemas multiestelares Kepler-34, -35, -38, -64 y -413 con planetas gigantes tendrían zonas habitables estables.
Hace casi medio siglo, los creadores de Star Wars imaginaron un planeta sustentador de vida, Tatooine, orbitando un par de estrellas. Ahora, científicos han encontrado nueva evidencia de que cinco sistemas conocidos con múltiples estrellas, Kepler-34, -35, -38, -64 y -413, son posibles candidatos para sustentar la vida.
Un marco matemático recientemente desarrollado permitió a los investigadores de la Universidad de Nueva York en Abu Dhabi y la Universidad de Washington demostrar que esos sistemas, entre 2.764 y 5.933 años luz de la Tierra, en las constelaciones Lyra y Cygnus, sustentan una ‘Zona Habitable’ permanente, una región alrededor de estrellas en las que el agua líquida podría persistir en la superficie de cualquier planeta similar a la Tierra aún no descubierto.
De estos sistemas, se sabe que Kepler-64 tiene al menos cuatro estrellas orbitando entre sí en su centro, mientras que los otros tienen dos estrellas.
Se sabe que todos tienen al menos un planeta gigante del tamaño de Neptuno o más. Este estudio, publicado en Frontiers in Astronomy and Space Sciences, es una prueba de principio de que la presencia de planetas gigantes en sistemas binarios no excluye la existencia de mundos potencialmente sustentadoras de vida.
“Es mucho más probable que la vida evolucione en planetas ubicados dentro de la Zona Habitable de su sistema, al igual que la Tierra. Aquí investigamos si existe una Zona Habitable dentro de nueve sistemas conocidos con dos o más estrellas orbitadas por planetas gigantes. Demostramos por primera vez que Kepler-34, -35, -64, -413 y especialmente Kepler-38 son adecuados para albergar mundos similares a la Tierra con océanos”, dice en un comunicado el autor correspondiente, el doctor Nikolaos Georgakarakos, investigador asociado de la División de Ciencias en la Universidad de Nueva York en Abu Dhabi.
El consenso científico es que la mayoría de estrellas albergan planetas. Desde 1992, se han descubierto exoplanetas a un ritmo acelerado: hasta ahora se han confirmado 4.375, de los cuales 2.662 fueron detectados por primera vez por el telescopio espacial Kepler de la NASA durante su misión 2009-2018 para estudiar la Vía Láctea.
El telescopio TESS de la NASA y misiones de otras agencias han encontrado más exoplanetas, mientras que la Agencia Espacial Europea debe lanzar su nave espacial PLATO para buscar exoplanetas en 2026.
Doce de los exoplanetas descubiertos por Kepler son “circumbinarios”, es decir, orbitan un par cercano de estrellas. Los sistemas binarios son comunes y se estima que representan entre la mitad y las tres cuartas partes de todos los sistemas estelares.
Hasta ahora, solo se han descubierto exoplanetas gigantes en sistemas binarios, pero es probable que los planetas y lunas más pequeños, similares a la Tierra, simplemente hayan escapado a la detección.
Se espera que las interacciones gravitacionales dentro de los sistemas de estrellas múltiples, especialmente si contienen otros cuerpos grandes como planetas gigantes, hagan que las condiciones sean más hostiles para el origen y la supervivencia de la vida.
Por ejemplo, los planetas pueden estrellarse contra las estrellas o escapar de la órbita, mientras que los exoplanetas similares a la Tierra que sobreviven desarrollarán órbitas elípticas, experimentando fuertes cambios cíclicos en la intensidad y el espectro de la radiación.
“Hace tiempo que sabemos que los sistemas estelares binarios sin planetas gigantes tienen el potencial de albergar mundos habitables. Lo que hemos demostrado aquí es que, en una gran fracción de esos sistemas, los planetas similares a la Tierra pueden permanecer habitables incluso en presencia de planetas gigantes”, dice el coautor, el profesor Ian Dobbs-Dixon, también de la Universidad de Nueva York en Abu Dhabi.
Con información de Europa Press.