Albahaca: la planta milagrosa para regenerar y cuidar la piel

La albahaca es una planta a la que se le conoce científicamente como (Ocimum basilicum), es originaria de Asia y es reconocida por sus propiedades curativas y medicinales.

Se trata de una “especia aromática, rica en aceites esenciales como el geraniol, eugenol y linalool, además de poseer importantes cantidades de taninos, saponinas y flavonoides, con propiedades antiespasmódicas, digestivas, diuréticas, sedantes y antioxidantes, las cuales ayudan a prevenir y a combatir problemas de salud como gripas, presión alta, infarto o insomnio”, según indica el portal Tua Saúde.

A esta planta se le pueden dar diferentes usos. Los beneficios de sus hojas se pueden aprovechar en forma de tés, baños, cataplasmas y aceites esenciales, brindando diferentes beneficios al organismo.

Es especial para el cuidado de la piel, al punto que hay quienes la llaman la hierba de la longevidad. “Para aprovechar sus beneficios basta con frotar suavemente una hoja sobre la piel todos los días, para que esta obtenga un resplandor natural y mejore su apariencia”, según el sitio web Mejor con Salud.

Para hacer un uso indicado se requiere de una hoja de albahaca y una taza de agua. Se calienta el agua y se añade la especia. Se deja reposar y se escurre un poco la hoja. Una vez tenga una temperatura soportable para la piel se frota en forma de masaje. Este procedimiento se puede realizar todos los días antes de ir a dormir.

Por otro lado, también se puede utilizar para curar el acné. Gracias a que tiene propiedades antisépticas, antiinflamatorias y cicatrizantes, la albahaca purifica la sangre y elimina las toxinas, dejando la piel libre de impurezas.

En este caso, la persona puede masticar hojas de albahaca en la mañana, sin necesidad de cocción. También puede hacer una mascarilla con sus hojas, aplicarla en las zonas afectadas y dejarla actuar por 30 minutos.

Desmaquillante

Para darle suavidad y naturalidad a la piel, esta especia también se usa como desmaquillante. Se puede utilizar una onza de esencia de albahaca, una cantidad similar de aceite de sésamo y una onza de jugo de durazno. Se ponen los ingredientes en un recipiente y se mezclan hasta conseguir una combinación homogénea. Se aplica la mezcla con un algodón de manera circular en el rostro. Este remedio casero se puede realizar todas las noches antes de dormir.

Otra forma de usarla es como aceite para el cuerpo, el cual ayuda a relajar gracias a las propiedades aromáticas que tiene la planta. Se requiere de unas 10 onzas de flores de la planta de albahaca y cuatro tazas de aceite de almendras. Para elaborar este remedio, se machacan las flores y se mezclan con el aceite. Se deja reposar durante 30 días, en un lugar fresco. Pasado este tiempo se cuela y queda lista la preparación para aplicarla en la piel.

Otros beneficios de la planta

El portal Nutrición y Farmacia, de España, asegura que esta hierba es una “aliada del estómago y se usa con éxito para aliviar la dispepsia, la pesadez estomacal, los espasmos gastrointestinales, diarrea y las náuseas”.

También en la cultura popular se dice que ayuda a reducir los gases y a prevenir flatulencias. La infusión de sus hojas frescas también podría resultar de utilidad para estimular el apetito y favorecer la digestión de los alimentos.

Por último, a esta planta se le atribuyen propiedades antiinflamatorias y cicatrizantes. “Un equipo de científicos del Instituto Salk para Estudios Biológicos, de la Universidad de Michigan, Estados Unidos, estudió la enzima sintasa eugenol y su capacidad para construir propiedades anti microbióticas y analgésicas”, precisa Nutrición y Farmacia.

Es por esto, que en muchas oportunidades las personas la usan para aliviar dolores bucales, para ayudar a curar las aftas, quitar la gingivitis y para frenar posibles infecciones bacterianas que se desarrollen en las cavidades bucales.