Alopecia femenina: estas son sus causas y tratamientos

La alopecia es la pérdida de cabello y puede afectar tanto a hombres como a mujeres. Cuando se presenta en ellas, el patrón de caída es distinto.

Si bien la caída del cabello es algo natural, ya que forma parte de su proceso de crecimiento y es necesario que se caiga para que otro nuevo lo sustituya de a poco, cuando esta regeneración no se produce al ritmo debido se presenta la alopecia, enfermedad que lleva a que los afectados pierdan el pelo de forma parcial o total.

El crecimiento del pelo está regulado por el sistema hormonal y la aparición de la alopecia suele estar relacionada con irregularidades en este, precisa un artículo de la revista Muy Interesante. Situaciones de estrés, alteraciones hormonales derivadas de otras patologías, temas genéticos o el simple paso del tiempo suelen ser algunos de los motivos más comunes que provocan la aparición de la alopecia.

De acuerdo con información de la compañía prestadora de salud Sanitas, las causas de la alopecia femenina pueden ser muy variadas, destacando los desequilibrios hormonales que se producen tras la menopausia, con un descenso de los estrógenos y un aumento de la presencia de andrógenos, que son hormonas masculinas.

También se considera normal que se produzca una caída inusual del cabello después del parto, en tanto que el organismo recupera el equilibrio hormonal habitual o al abandonar el tratamiento anticonceptivo con hormonas femeninas, ya que estos estrógenos potencian la fase anágena o de crecimiento del cabello, precisa Sanitas.

La genética también influye y son más propensas a la alopecia aquellas mujeres con antecedentes familiares, sean éstos masculinos o femeninos. No obstante, hay otros factores fisiológicos que pueden ocasionar la caída abundante del cabello.

Entre ellos está, por ejemplo, el mal funcionamiento de las glándulas tiroideas, tanto si se trata de hipertiroidismo como de hipotiroidismo, ya que inducen un aumento o descenso de la tiroxina y ello hace que el pelo se haga más fino y finalmente caiga. Las mujeres con ovarios poliquísticos también pueden sufrir una pérdida anormal de cabello.

Adicionalmente, puede haber otras razones que tienen incidencia como el estrés, la contaminación, una mala alimentación, fumar, una higiene capilar deficiente, el uso frecuente de extensiones y la agresión permanente con productos químicos de peluquería.

La Corporación Capilar de España indica que el consumo de anticonceptivos provoca algunas alteraciones hormonales, al igual que los antidepresivos, antiinflamatorios y anticoagulantes. Además, tratamientos como la quimioterapia tienen un efecto negativo sobre la salud del cabello.

Tipos de alopecia femenina

Según información de Quirón Salud, grupo hospitalario privado de España, existen diferentes tipos de alopecia en la mujer. Se puede presentar ser por la caída del pelo por la parte superior de la cabeza, la caída estacional que puede durar unos meses o la caída definitiva del cabello.

A la primera de le conoce como alopecia androgenética femenina. En este caso, el pelo se va miniaturizando hasta que deja de crecer y desaparece. Este tipo de alopecia, a diferencia de la calvicie de los hombres se inicia en la parte frontal y luego se extiende a los lados y hacia la coronilla, áreas que van teniendo una mínima densidad o pelo cada vez más fino.

El segundo tipo es el efluvio telógeno. Esta patología capilar hace referencia a la caída del cabello frecuente en los meses de otoño y primavera, estaciones que están asociadas a la renovación del ciclo capilar. No obstante, también puede causarse por algún episodio de estrés o algún problema de salud. Esta pérdida es reversible y de buen pronóstico para aquellas mujeres que la padecen.

Por último, la alopecia frontal fibrosante, que es una caída de cabello definitiva. Normalmente es consecuencia de un proceso inflamatorio autoinmune que destruye las unidades foliculares, es decir, de la agrupación de cabellos.

Tratamiento

Cuando el problema es de índole hormonal, el uso de terapia hormonal de sustitución en la menopausia o de la píldora anticonceptiva en otras situaciones puede evitar la progresión de la alopecia. Según Sanitas, también hay otros productos como espironolactona, cimetidina y ketoconazol, que suelen utilizarse cuando estos tratamientos fallan, pero su efectividad es muy discutida.

Otra opción es el implante autólogo de cabello, aunque este solo debe realizarse cuando se tiene la seguridad de que el pelo implantado no se va a caer.