Vida moderna

Antiedad: cómo usar ajo para eliminar arrugas y rejuvenecer el rostro

Tener una rutina diaria de cuidado es importante para lucir una piel joven.

7 de junio de 2022
Expertos destacan que la crema de manzana ayuda a reducir las arrugas y líneas de expresión y disminuye la grasa en la piel. Foto: Getty images.
Antes de aplicar cualquier producto en el rostro se debe consultar con un dermatólogo. Foto: Getty images. | Foto: Foto: Getty images.

Las arrugas son un signo natural del envejecimiento. Estas aparecen, debido a que con el paso del tiempo, la proteína encargada de brindar elasticidad y tensión a la piel (colágeno) disminuye su producción.

Sin embargo, también hay otros factores que influyen en esto. “Si bien la genética es la que determina principalmente la estructura y la textura de la piel, la exposición solar es una de las causas principales de la aparición de arrugas, en especial, en las personas de piel clara. Los contaminantes y el tabaquismo también contribuyen a la aparición de arrugas”, explica Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicad a la práctica clínica, la educación y la investigación.

Existen diferentes tratamientos, cirugías y procedimientos estéticos para mejorar la apariencia de la piel. Asimismo, también hay productos especializados para combatir los signos de la edad y “prevenirlos”. Cabe resaltar que ninguno de estos es 100 % efectivo, pues las arrugas son un proceso natural del cuerpo humano.

Las mascarillas caseras también son una opción muy popular, elegida por las personas para cuidar su piel. Sin embargo, antes de aplicar cualquier producto en el rostro, se debe consultar con un dermatólogo.

El portal Mejor con Salud destaca los beneficios del ajo para las arrugas. “Se puede aplicar de forma directa sobre la piel y resulta muy saludable. Sus agentes curativos favorecen la eliminación de imperfecciones y le brindan una capa protectora contra los daños que causan las arrugas tempranas”, explica el sitio web.

El portal web explica los pasos para preparar varias mascarillas con ajo para el tratamiento de las arrugas. Cabe resaltar que antes de aplicar cualquiera se debe consultar con un médico. En caso de que se realice, lo recomendable es realizar una prueba de alergia en una pequeña parte del cuerpo para verificar que no haya reacciones adversas.

Mascarilla #1

Ingredientes

  • 1 diente de ajo.
  • 1 cucharada de arcilla blanca (10 g).
  • 2 cucharadas de miel de abejas (50 g).
  • Agua.

Preparación

  1. Triturar muy bien el diente de ajo.
  2. En una taza mezclar el ajo junto con la arcilla blanca y la miel.
  3. Agregar un poco de agua para que quede una pasta espesa.
  4. Limpiar y secar el rostro antes de aplicar el tratamiento.
  5. Aplicar en todo el rostro.
  6. Dejar actuar por 20 minutos.
  7. Retirar con agua fría.
  8. Repetir de 2 a 3 veces a la semana para mejorar los resultados.

Mascarilla #2

Ingredientes

  • 1 diente de ajo.
  • Agua.
  • 1 trozo de algodón.

Procedimiento

  1. Triturar muy bien el diente de ajo hasta formar una pasta.
  2. Añadir agua y revolver muy bien.
  3. Aplicar el producto en todo el rostro con un algodón.
  4. Esperar unos minutos y enjuagar con abundante agua.
  5. Esta mascarilla se debe repetir varias veces a la semana para mejorar los resultados. Siempre se debe aplicar en la noche, debido a que si la piel entra en contacto con el sol pueden haber efectos negativos.

¿Como cuidar el rostro?

Mayo Clinic insiste en la importancia de cuidar el rostro diariamente. Uno de los pasos más importantes es la protección solar, debido a que aumenta el riesgo de arrugas prematuras y de desarrollar cáncer de piel. “La radiación ultravioleta, que acelera el proceso de envejecimiento natural, es la causa principal de la aparición de arrugas precoces. La exposición a la luz ultravioleta rompe el tejido conectivo de la piel, compuesto por colágeno y fibras de elastina, que se encuentra en la capa más profunda de la piel (dermis)”, explica la entidad de salud.

  • No fumar.
  • No durar tanto tiempo en la ducha, en especial si es agua caliente o tibia.
  • Evitar el uso de jabones fuertes.
  • Al momento de afeitarse, aplicar cremas y lociones humectantes para lubricar la piel.