Se cree que a partir de los 25 años de edad la producción de colágeno disminuye, por eso la alimentación cumple un papel fundamental, ya que por medio de ciertos alimentos se puede ayudar a producir esta proteína. La piel es el órgano más grande del cuerpo, se cree que sus células se regeneran cada 28 a 35 días, pero con el paso de los años este proceso se empieza a realizar de manera más lenta y esto puede ocasionar la aparición de arrugas o líneas de expresión.

El proceso de envejecimiento es un proceso natural que todas las personas tendrán que enfrentan en algún momento de su vida; sin embargo, una buena alimentación puede ayudar a evitar que este proceso surja antes de los previsto; Algunos malos hábitos como fumar, la exposición al sol desmedida y sin protección, la falta de actividad física, una mala alimentación y la poca hidratación pueden acelerarlo.

El colágeno cumple diversas funciones en el organismo, como dar firmeza, estructura y elasticidad a varios tejidos del cuerpo, en especial a la piel, los huesos, las articulaciones, los tendones y la cornea en los ojos.

El portal de salud y medicina KidsHealth asegura que el cuerpo produce de manera natural tres tipos de colágeno. El primero se encuentra en los huesos y los tendones; el segundo, en el cartílago (el material flexible de la nariz, la orejas y las articulaciones), y el tercero, en la piel, en el revestimiento de los vasos sanguíneos y en los intestinos.

Aliados para no perder el colágeno

El portal de salud y cuidado personal Saber Vivir brinda algunas recomendaciones para evitar que la pérdida de colágeno aumente.

• Un sueño suficiente y reparador: la melatonina, hormona relacionada con el sueño, tiene un poder antioxidante y antiinflamatorio, lo que ayudar a reducir los signos de la edad. Se recomienda dormir durante siete horas seguidas, lo que puede ayudar a aumentar la hormona del crecimiento. Los niveles adecuados de esta hormona mejoran la síntesis del colágeno.
• Actividad física y una buena alimentación: estos dos buenos hábitos son el mejor antídoto contra el envejecimiento. Además, ayudan a mantener de manera sana a todos los órganos del cuerpo.
• Una dieta baja en azúcares y harinas refinadas: este tipo de productos aumenta de manera acelerada la glucosa en la sangre. Este exceso se adhiere a algunas proteínas (elastina y colágeno) y las vuelve rígidas, gracias a un proceso denominado glicación.

Alimentos que aportan colágeno

• Carnes magras y pescado: la proteína forma aminoácidos y son esos compuestos los que ayudan a formar el colágeno. Se recomienda consumir carnes magras y pescados como el salmón.
• Consumir sopa de menudencias: esta es una de las preparaciones caseras que más colágeno aporta. Las patas de pollo son ricas en colágeno ya que aportan una gran cantidad de proteínas biodisponibles, es decir, de fácil aprovechamiento. Esta sopa contiene condroitina y glucosamina, unos compuestos que se usan en medicina para mejorar el dolor y la rigidez en las articulaciones que padecen las personas que son diagnosticas con artritis.

• Huevos y lácteos: consumir estos productos mantiene en buen estado los niveles de colágeno, se recomienda consumir lácteos bajos en grasa para no perjudicar otras áreas de la salud.
• Las legumbres, los frutos secos, los cereales y las semillas: aunque son proteínas parcialmente incompletas (porque no contienen todos los aminoácidos esenciales) también son necesarios para que el cuerpo sintetice eficazmente el colágeno.