Vida Moderna
Artrosis: reduzca los dolores con estas plantas medicinales
La osteoartritis o artrosis es la enfermedad degenerativa articular más frecuente.
La artrosis es una patología reumática que lesiona el cartílago articular, de acuerdo con la Fundación Española de Reumatología.
Además, según Mayo Clinic, la artrosis es una enfermedad degenerativa que empeora con el tiempo y que a menudo produce dolor crónico. De hecho, el dolor y la rigidez en las articulaciones pueden llegar a ser lo suficientemente intensos como para dificultar las tareas diarias.
Asimismo, reveló que los factores que pueden aumentar su riesgo de artrosis incluyen los siguientes:
- Edad avanzada. El riesgo de tener artrosis aumenta con la edad.
- Sexo. Las mujeres son más propensas a padecer artrosis, aunque no está claro por qué.
- Obesidad. Un peso mayor agrega estrés a las articulaciones que soportan peso, como las caderas y las rodillas. Además, el tejido graso produce proteínas que pueden causar inflamación en las articulaciones y alrededor de estas.
- Lesiones articulares. Las lesiones, como las que ocurren al practicar deportes o por un accidente, pueden aumentar el riesgo de artrosis. Incluso las lesiones que ocurrieron hace muchos años y que aparentemente ya sanaron pueden aumentar el riesgo de artrosis.
- Tensión repetida en la articulación. Si el trabajo o el deporte que practica una persona someten a una articulación a un esfuerzo repetitivo, esa articulación podría presentar artrosis con el tiempo.
- La genética. Algunas personas heredan la tendencia a desarrollar artrosis.
- Deformidades óseas. Algunas personas nacen con articulaciones malformadas o cartílagos defectuosos.
- Ciertas enfermedades metabólicas. Estas incluyen diabetes y una afección en la cual su cuerpo tiene demasiado hierro (hemocromatosis).
En consecuencia, la entidad sin ánimo de lucro reveló que un fisioterapeuta puede mostrar ejercicios para fortalecer los músculos alrededor de la articulación, aumentar la flexibilidad y reducir el dolor. Además, la actividad física de baja intensidad periódica que hace una persona por su cuenta, como nadar o caminar, puede ser igual de efectiva.
Tendencias
Asimismo, otro tratamiento para la artrosis es un terapeuta ocupacional, ya que este puede ayudar a descubrir maneras de hacer las tareas cotidianas para que no requieran un sobre esfuerzo por parte de la articulación dolorosa. Por ejemplo, un cepillo de dientes con un agarre grande podría facilitar el cepillado de los dientes si la persona tiene artrosis en las manos o un banco en la ducha podría ayudar a aliviar el dolor de estar de pie si la persona tiene osteoartritis de la rodilla.
De igual forma, señaló que también se utiliza una corriente eléctrica de bajo voltaje para aliviar el dolor, pues proporciona alivio a corto plazo para algunas personas con osteoartritis de rodilla y cadera.
Sin embargo, el diario español Mundo Deportivo reveló, en su sección de Salud, que existen varias plantas naturales para mejorar los dolores de la artrosis como, por ejemplo, la cola de caballo, ya que es una planta antiinflamatoria que aporta minerales y vitaminas al cuerpo. La recomendación es consumirla en infusión.
Asimismo, recomendó consumir jengibre, pues es antiinflamatorio, relajante muscular, vasodilatador, y actúa como afrodisiaco natural y las múltiples propiedades del jengibre se deben sobre todo a su riqueza en aceites volátiles, sustancias fenólicas (denominadas gingeroles, shoagoles y gingeronas), enzimas proteolíticas, ácido linoleico, vitaminas (especialmente vitamina B6 y vitamina C) y minerales (calcio, magnesio, fósforo y potasio).
De igual forma, el diario sugirió realizar baños de ortiga, pues a esta planta se le atribuyen propiedades depurativas y diuréticas, hemostáticas, astringentes, analgésicas y antiinflamatorias.
Otra recomendación es la cúrcuma, porque tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias y los compuestos de la cúrcuma, llamados curcuminoides (la curcumina, la demetoxicurcumina y la bisdemetoxicurcumina), le otorgan grandes propiedades medicinales a esta especia. Sus aceites volátiles (turmerone, atlantone y zingiberene), proteínas, resinas y azúcares, también contribuyen su poder sanador. Además, para completar su perfil de ‘reina de las especias’, también contiene fibra dietética, vitaminas C, E y K, niacina, sodio, calcio, potasio, cobre, magnesio, hierro y zinc, según el grupo Sanitas en España.
De todos modos, antes de consumir algún medicamento o iniciar un tratamiento lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guie el proceso e indique que es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas.