Vida Moderna
Así se debe consumir el pescado para prevenir la obesidad y la diabetes
El pescado es rico en vitaminas y minerales.
El pescado es una parte importante de una dieta saludable, ya que es una fuente de proteínas de alta calidad, magras y de bajas calorías que adicional, contiene nutrientes esenciales y ácidos grasos omega-3, y tienen pocas grasas saturadas, de acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos.
Además, su consumo tiene varios beneficios, pues su ingesta, según el portal de salud Clikisalud de la Fundación Carlos Slim, es ideal para proteger el corazón y el sistema circulatorio.
“Las personas que consumen pescado y otros mariscos corren un menor riesgo de presentar varias enfermedades crónicas. Sin embargo, no está claro si estos beneficios para la salud vienen simplemente por comer estos alimentos o del omega-3 en estos”, señaló el Instituto Nacional de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Asimismo, un blog de Seguras Sura señaló que por “su valor calórico bajo, es muy recomendado para personas con sobrepeso”.
Adicional, la Fundación Española del Corazón indicó que “un estudio realizado por miembros del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valencia concluyó que el consumo de pescado se asocia con un menor riego de desarrollo de diabetes”.
Por ello, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos recomienda el pescado como parte de una dieta saludable para la mayoría de las personas, pero las mujeres embarazadas, que planean quedar embarazadas o que están amamantando, y los niños pequeños deben evitar comer pescado con el potencial de altos niveles de contaminación por mercurio.
Así las cosas, las recomendaciones son:
- Los adultos deben comer por lo menos 8 onzas (226,80 g) o dos porciones de pescado rico en omega-3 a la semana. El tamaño de la porción es de 4 onzas (113,40 g) o aproximadamente el tamaño de una baraja de cartas.
- Las mujeres embarazadas, que planean quedar embarazadas o que están amamantando, deben comer hasta 12 onzas (340,20 g) de mariscos por semana de una variedad de opciones que son más bajas en contaminación por mercurio.
- Los niños también deben comer pescado de opciones con menos mercurio una o dos veces por semana. El tamaño de la porción para niños menores de 2 años es de 1 onza (28,34 g) y aumenta con la edad.
De todos modos, antes de consumir algún alimento, lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Características de los pescados frescos
- Ojos
Buena calidad: Ocupa toda la cavidad orbitaria, transparentes, brillantes, salientes, pupila oscura.
Mala calidad: Opacos, hundidos, nublados, pupila gris.
- Branquias
Buena calidad: Del rosado al rojo intenso, húmedas y brillantes, sin sustancias viscosas, olor suave a mar.
Mala calidad: Café parduzco, mucus amarillento y espeso.
- Músculo (carne)
Buena calidad: Firme y elástica al tacto, bien adherida a los huesos y que no se desprendan de ellos al ejercer presión con los dedos; color propio con superficie de corte brillante.
Mala calidad: Blanda y floja, se desprende de los huesos y espina con facilidad.
- Olor
Buena calidad: Agradable, con aroma marino.
Mala calidad: Anormal, amoniacal, fétido.
- Escamas
Buena calidad: Unidas entre sí, bien adheridas a la piel, con brillo metálico, no viscosas.
Mala calidad: Opacas, viscosas, pérdida de gran cantidad de escamas al tacto.
- Cavidad abdominal
Buena calidad: Completamente, eviscerada y limpia, superficie sin desgarres, lustrosa.
Mala calidad: Desgarrada, huesos o espinas separadas del tejido, evisceración incompleta.