Así se debe consumir la habichuela para prevenir la artritis y el reumatismo

La artritis y el reumatismo son términos amplios que se utilizan para describir una variedad de enfermedades que afectan las articulaciones, los músculos, los huesos y otros tejidos del sistema musculoesquelético. Estas condiciones pueden ser causadas por múltiples factores y a menudo no tienen una causa única, pero generalmente se relacionan, de acuerdo con el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), con:

• Inflamación: La inflamación crónica es una característica común de muchas enfermedades reumáticas, como la artritis reumatoide. La inflamación persistente puede dañar las articulaciones y otros tejidos.
• Autoinmunidad: En algunas formas de artritis, como la artritis reumatoide, el sistema inmunológico del cuerpo ataca por error las articulaciones y otros tejidos, lo que lleva a la inflamación y al daño.
• Genética: Se ha demostrado que la predisposición genética desempeña un papel en algunas enfermedades reumáticas. Si tienes antecedentes familiares de artritis, puedes tener un mayor riesgo de desarrollarla.

• Factores ambientales: Se ha sugerido que la exposición a ciertos factores ambientales, como infecciones, puede desencadenar la artritis en personas genéticamente susceptibles.
• Envejecimiento: El envejecimiento natural del cuerpo puede contribuir al desgaste de las articulaciones y aumentar el riesgo de desarrollar artritis.
• Lesiones: Las lesiones articulares previas o el uso excesivo de las articulaciones también pueden aumentar el riesgo de desarrollar artritis o reumatismo.

Los beneficios de la habichuela para prevenir artritis y reumatismo

Un estudio del Instituto Nacional de Salud de los Estados Unidos (NIH) demostró que la habichuela, un ingrediente común en muchas cocinas, puede desempeñar un papel importante en la prevención de la artritis y el reumatismo.

Las habichuelas son una fuente rica en antioxidantes, fibra y otros nutrientes esenciales. Los antioxidantes, a su vez, combaten los radicales libres en el cuerpo, reduciendo la inflamación y el daño celular, dos factores clave en el desarrollo de la artritis y el reumatismo.

Según el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), una alimentación rica en legumbres como las habichuelas también ayuda a controlar el peso corporal, lo que a su vez disminuye la presión sobre las articulaciones y previene el estrés en estas. El mantenimiento de un peso saludable es un aspecto fundamental en la prevención de enfermedades reumáticas.

¿Cómo consumir la habichuela?

Sopas y guisos: Las habichuelas son un ingrediente versátil que se puede agregar a sopas y guisos para aumentar su valor nutricional. Tanto el NIH como el CDC recomiendan incluir habichuelas en comidas de cuchara (conocidas también como el ‘seco’) para aprovechar sus beneficios.

• Ensaladas: Añadir garbanzos o lentejas a ensaladas verdes agrega proteínas y fibra. Esto no solo mejora el sabor, sino que también contribuye a mantener articulaciones saludables.
• Hamburguesas vegetarianas: La mezcla de habichuelas y otros vegetales en hamburguesas vegetarianas es una excelente manera de aumentar la ingesta de legumbres.
• Snacks saludables: Las habichuelas tostadas son una opción deliciosa y saludable para ‘picar’ entre comidas.

¿Cómo prevenir la artritis y el reumatismo?

El Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel (NIAMS) de los Estados Unidos recomienda:

• Mantener un peso saludable: El exceso de peso ejerce presión adicional sobre las articulaciones, especialmente las de las piernas y la espalda. Mantener un peso adecuado puede reducir el riesgo de desarrollar osteoartritis.
• Hacer ejercicio regularmente: La actividad física moderada ayuda a mantener la flexibilidad y la fuerza de las articulaciones. Ejercicios como la natación, el yoga y el ciclismo pueden ser beneficiosos. Consulta con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier programa de ejercicios.
• Proteger las articulaciones: Evita lesiones al practicar deportes o actividades físicas. Usa equipo de protección adecuado y adopta técnicas adecuadas para reducir el riesgo de lesiones articulares.
• Mantener una dieta equilibrada: Una alimentación saludable rica en frutas, verduras, granos enteros y proteínas magras puede ayudar a controlar el peso y proporcionar los nutrientes necesarios para la salud articular.
• Evitar el tabaco: Fumar se ha asociado con un mayor riesgo de desarrollar artritis reumatoide. Dejar de fumar puede ayudar a reducir este riesgo.
• Beber con moderación: El consumo excesivo de alcohol puede aumentar el riesgo de desarrollar algunas formas de artritis. Si consumes alcohol, hazlo con moderación.
• Controlar las infecciones: Algunas infecciones pueden desencadenar enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide. Mantener las vacunas al día y tomar medidas para prevenir infecciones puede ser beneficioso.
• Consultar con un médico: Si tienes antecedentes familiares de enfermedades reumáticas o experimentas síntomas como dolor en las articulaciones, rigidez o inflamación, busca atención médica temprana. El diagnóstico y el tratamiento oportunos pueden ayudar a prevenir daños articulares significativos.