Así se prepara el té con fruta que cuida el cerebro y el corazón

La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus) sugiere incluir en una dieta balanceada, frutas y verduras que favorecen el cuerpo porque tienen minerales, vitaminas y nutrientes.

La lista es amplia de cada uno de estos alimentos que pueden beneficiar la salud gracias a sus efectos, como los antioxidantes que neutralizan los radicales libres que dañan las células del cuerpo y guardan relación con el envejecimiento prematuro, explica MedlinePlus.

Por ejemplo, los arándanos azules, que para la enciclopedia médica son usados también para la medicina, mejoran la digestión y tratan la inflamación gracias a la vitamina C que la componen.

Conocido científicamente como Vaccinium angustifolium, el arándano azul también tiene un efecto positivo sobre las funciones cognitivas como la memoria y el pensamiento, incluso sobre enfermedades que aquejan el corazón como la presión arterial alta.

Arándanos y el corazón

Dentro del grupo de enfermedades cardíacas, muchos son los factores de riesgo asociados, como el colesterol o la presión arterial alta, que pueden incidir en el desarrollo de estas afecciones.

Por esto, Tua Saúde señala que los arándanos al estar compuestos de fibra y polifenoles pueden reducir el colesterol LDL, que según la Clínica Mayo “es una sustancia cerosa que se encuentra en la sangre”, que inicialmente, cuando se considera ‘buena’ (HDL - lipoproteínas de alta densidad) ayuda en la formación de células y otras funciones del cuerpo; sin embargo, los altos niveles de colesterol LDL (lipoproteína de baja densidad) incrementa el riesgo de una enfermedad cardíaca.

Lo mismo ocurre con la hipertensión porque gracias a los fitoquímicos y las antocianinas, según el sitio web, los arándanos pueden mejorar las funciones de los vasos sanguíneos regulando la presión arterial.

Cabe recordar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que la hipertensión se debe a la presión de la sangre sobre los vasos sanguíneos que supera los 40/90 mmHg o más, que al ser una afección silenciosa coloca en riesgo la vida de una persona.

Arándanos y el cerebro

En palabras del Instituto Nacional del Cáncer (NCI) el cerebro es “la parte más grande del encéfalo”, que dentro de los dos hemisferios que tiene, se encuentran varias funciones reguladas por “áreas internas” como el pensamiento, el aprendizaje e incluso las emociones.

De tal manera, que Tua Saúde vuelve a mencionar las antocianinas de los arándanos porque tienen propiedades antiinflamatorias, disminuyendo la hinchazón y la inflamación de las células del cerebro, enfocándose en mejorar las funciones cognitivas reduciendo el riesgo del Alzheimer.

Sin embargo, valga una aclaración según la Clínica Mayo: el Alzheimer no se puede prevenir. No obstante, con algunos cambios en el estilo de vida se podría reducir su riesgo, ya que muchos son los factores asociados como el genético y/o la edad, indica.

La OMS menciona que “la enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia y puede representar entre un 60% y un 70% de los casos”.

Diabetes y arándanos

Esta enfermedad consiste en la no producción de insulina por parte del páncreas (diabetes tipo 1) y la resistencia de las células a ella (diabetes tipo 2). Por esto, los arándanos tienen la capacidad de regular el azúcar de la sangre y evitar el desarrollo de diabetes tipo 2 porque permite la sensibilidad a la insulina, señala Tua Saúde.

Té de arándanos

1. Hervir una taza de agua.
2. Agregar a otra taza, arándanos secos para luego verter el agua caliente
3. Tapar.
4. Dejar reposar por cinco minutos.
5. Colar.
6. Consumir.

Finalmente, es importante, antes de una ingesta regular, consultar con un profesional de la salud, para incluirla en una dieta balanceada y poder aprovechar sus beneficios.