Así se prepara el té de moringa para estabilizar los niveles de glucosa y perder peso

La moringa es una planta medicinal que puede ayudar a mejorar la diabetes de forma natural. Gracias a sus potentes propiedades hipoglucemiantes, la moringa reduce los niveles elevados de glucosa en la sangre y ayuda a regular el correcto funcionamiento del páncreas y tiene otros beneficios para la salud del organismo.

El portal unCOMO reveló las propiedades de la moringa y cómo estas pueden regular la diabetes.

Propiedades de la moringa para la diabetes

La moringa es un árbol originario del norte de India cuyas hojas son utilizadas de manera medicinal por sus diversas propiedades curativas. Al árbol de la moringa también se le llama árbol de la vida, ya que contiene gran valor nutricional gracias a los minerales, vitaminas, aminoácidos y ácidos grasos que posee.

La moringa cuenta con propiedades antioxidantes beneficiosas para el organismo y puede ser utilizada para controlar y combatir el colesterol, cicatrizar heridas y proteger tejidos, desinflamar y aliviar dolores, mejorar úlceras de estómago, tratar la hipertensión, proteger el hígado, detener la proliferación de células cancerosas y fortalecer el sistema inmunológico.

Como se mencionó con anterioridad, la moringa es una de las mejores plantas medicinales para tratar la diabetes de forma natural. Esto teniendo en cuenta que:

• Ejerce una acción hipoglucémica, pues ayuda a reducir la cantidad de azúcar en sangre.
• Estabiliza los niveles de glucosa.
• Regula el correcto funcionamiento del páncreas y ayuda a que se produzca la insulina necesaria para el cuerpo humano.
• Favorece la pérdida de peso.

¿Cómo tomar la moringa para la diabetes y perder peso?

Una vez conocidas todas las propiedades, es importante resaltar las diferentes formas de consumir moringa, algunas de ellas son:

Té de moringa

La moringa puede consumirse en forma de infusión, para prepararla debe seguir las siguientes instrucciones:

• Hervir una taza de agua, apagar el fuego y agregar una cucharada pequeña de hojas de moringa.
• Dejar reposar entre 3 y 7 minutos, luego retirar las hojas y consumir la infusión.
• Agregar unas hojas naturales de estevia si desea para endulzar. Debe recordar que las hojas de moringa no deben hervir porque perderían sus propiedades medicinales y nutricionales.

El té de moringa acelera el metabolismo, lo cual ayuda al proceso de pérdida de peso debido a que los nutrientes se metabolizan más rápido y la energía que se produce necesita quemar más grasa, incluso en estado de reposo, colaborando así en la pérdida de peso.

Polvo de moringa

Otra de las formas en la que puede tomar moringa para la diabetes es en la presentación de polvo que puede encontrar en los herbolarios.

Este polvo luego lo puede mezclar con cualquier comida o bebida (infusión, batido o sopas). La dosis debe consultarla con un profesional de la salud, sin embargo, la dosis general es: ¼ de cucharada de polvo de hoja de moringa (1 gramo o 0,03 onzas) por día los primeros 3 o 5 días. Esta debe consumirse preferiblemente en el desayuno y siempre acompañada de alimentos. Pasado los 3 o 5 días, puede incrementar la dosis a media cucharada (3 gramos o 0,10 onzas) al día.

Moringa en cápsulas

La moringa también viene en presentación de cápsulas, las cuales se encuentran en herbolarios. Por lo general, se consume una cápsula por la mañana con el desayuno.

Moringa fresca

Si la persona tiene una planta de moringa en casa, puede utilizar sus hojas para consumirlas directamente. Para ello, debe lavarlas y mezclarlas en las ensaladas.

Contraindicaciones de la moringa

Antes de tomar la moringa para la diabetes, es muy importante saber cuáles son las contraindicaciones de la misma, ya que su consumo no es recomendable en los siguientes casos:

• Para mujeres embarazadas.
• Mujeres en periodo de lactancia.
• Pacientes que estén tomando medicamentos para la coagulación sanguínea.
• Personas que están tomando somníferos o medicamentos para dormir.

Por último, es esencial tener en cuenta que un uso excesivo de esta planta puede tener algunos efectos adversos, como diarrea, náuseas o acidez estomacal.