Así se prepara el té que se debe tomar en la noche para quemar grasa

La grasa corporal se reparte de forma homogénea por todo el cuerpo, aunque en algunas zonas se acumula más cantidad.

En tal sentido, los expertos en salud señalan que mientras las personas duermen, las células del cuerpo cumplen el ciclo de recuperarse, trabajar con mayor eficiencia y quemar grasa.

Sin embargo, existen infusiones que poseen propiedades adelgazantes para tomar en la noche, antes de la persona ir a dormir.

Una de estas es el té de jengibre, canela y limón, el cual sirve para quemar grasa. Por lo tanto, por cada litro de agua, se deberá añadir el jugo de dicho cítrico y una cucharadita de canela.

Además de servir para quemar grasa, afirman que este té purifica la sangre, desinflama y elimina las flatulencias.

Por otra parte, un estudio de la Universidad Politécnica Estatal de California y del Departamento de Kinesiología y Gestión Deportiva de la Universidad Gonzago, señaló que los arándanos ayudan a mejorar el rendimiento deportivo y a quemar grasa.

La investigación estableció que comer 25 gramos de estas bayas liofilizadas al día equivale a comer alrededor de una taza de la fruta en su forma natural, haciendo que el cuerpo queme más grasa mientras hace ejercicio.

Así mismo, los investigadores indicaron que esta fruta podría ayudar a los músculos a ahorrar glucógeno, principal fuente de energía del cuerpo.

Por lo tanto, el estudio estableció que dicha fruta podría ayudar a la persona a hacer ejercicio durante más tiempo e incluso a rendir más.

Para llegar a esa conclusión, los investigadores reclutaron a 11 ciclistas varones sanos, quienes por dos semanas consumieron 25 g diarios de polvo liofilizado de arándanos silvestres, que contenía 375 g de antocianinas.

“Este estudio fue el primero en investigar si el consumo de arándanos silvestres provocaría mayores tasas de oxidación de grasas durante un protocolo de ejercicio dirigido a maximizar la oxidación de grasas mediante ejercicios de intensidad moderada en hombres sanos entrenados (...) Este novedoso estudio documentó que el consumo de arándanos silvestres durante 14 días aumentó la oxidación de grasas, redujo la oxidación de hidratos de carbono y disminuyó los niveles plasmáticos de lactato durante 40 minutos de ciclismo de intensidad moderada”, indicaron los científicos en un informe.

La actividad de solo diez minutos para acabar con la grasa del abdomen

No hay duda de que el sueño de algunas mujeres y hombres es tener un abdomen plano. Es allí donde los expertos señalan que lo primero a tener en cuenta es que, si la persona quiere acabar con la grasa acumulada en el vientre, lo primero que debe empezar a hacer es cambiar sus hábitos alimenticios.

Aseguran que, si la persona sigue alimentándose mal y haciendo ejercicio, lo que terminará haciendo es perder peso, pero tal vez no eliminando la grasa en el abdomen que tanto le preocupa.

En tal sentido, para cumplir el objetivo, aconsejan intentar reducir la ingesta de carbohidratos y aumentar la de proteínas y fibra, además de grasas buenas, como las omega-3.

Además, existen algunos alimentos ideales para hacerle frente a la grasa en el vientre. Se trata de frutas, huevos, jengibre, frutos secos, aves, pescados, verduras de hoja verde y crucíferas, avena y yogur natural, entre otros más.

Sumado a lo anterior, existe un entrenamiento de diez minutos para adelgazar la grasa abdominal en un mes, tal como lo promete el reconocido entrenador Tyler Read.

“No necesitas pasar innumerables horas en el gimnasio para lograr los resultados que deseas. De hecho, solo tres entrenamientos de 10 minutos por semana pueden inclinar la balanza a tu favor y ayudarte a adelgazar la grasa del vientre en 30 días o menos (...) debes esforzarse lo máximo posible con los ejercicios de brazos y piernas durante los 10 minutos que dure el ejercicio. Recomiendo calentar antes si tienes tiempo y estirar después. Y durante los 10 minutos has de dar tu máximo. Realiza cada ejercicio durante 45 segundos. Descansa durante 15 segundos. Repite el circuito dos veces para un total de 10 minutos de trabajo. Para la pérdida de grasa adicional, agrega rondas adicionales”, dijo el experto en EatThis, de acuerdo con el portal The Objective.

Por orden de realización, los ejercicios del entrenamiento son los siguientes:

• Saltar a la cuerda
• Sentadillas con salto

• Hacer Flexiones
• Realizar sprints durante 45 segundos o a la máxima capacidad de cada persona
• Hacer burpees

Cuatro hábitos efectivos que acaban con la grasa abdominal

La grasa corporal es un importante componente de organismo, pues cumple funciones tan importantes como: proteger órganos, cubrir las articulaciones, controlar la temperatura y almacenar vitaminas; además de ser una fuente de energía.

Sin embargo, la cantidad y el lugar donde se ubique es clave para determinar si altera o no la salud. En el caso de la que se acumula en el abdomen, no solo es un molesto factor estético, sino que puede convertirse en un indicador de riesgo para la salud, según indica el instituto de investigación Mayo Clinic.

Si una persona come demasiado y hace poco ejercicio es posible que la grasa empiece a acumularse en esta parte de cuerpo. Además, la masa muscular puede disminuir ligeramente con la edad, mientras que la grasa aumenta. “La pérdida de masa muscular también disminuye la velocidad a la que el cuerpo utiliza las calorías, lo que puede hacer más difícil mantener un peso saludable”, precisa la mencionada institución.

Dado que este tipo de grasa puede tener efectos muy adversos en la salud, pues es posible que incida en el riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes e incluso cáncer, es importante controlar sus cantidades y para ello se pueden poner en práctica los siguientes hábitos, los cuales no solo ayudan a eliminarla, sino que, en general, benefician la salud del organismo.

Controlar el estrés

Bajarle al estrés es importante para reducir la presión arterial y mantener un sistema inmunológico saludable, indica el portal Men’s Health. Esta problemática a largo plazo aumenta la cantidad de glucocorticoides, hormonas que incrementan el hambre, según un estudio publicado en la revista Frontiers in Psychology. Manejar altos niveles de estrés implica más sensación de hambre, por lo que se aumenta la ingesta de alimentos y como consecuencia la grasa abdominal.

Actividad física

Realizar actividad física de manera regular debería ser parte de la rutina de todas las personas, pero hacer ejercicios cardiovasculares específicamente es una forma efectiva de perder grasa. Se pueden combinar ejercicios aeróbicos con entrenamiento de fuerza, ya que el primero permite un mayor gasto calórico, mientras que el segundo fortalece los músculos e incrementa el metabolismo basal, indica la publicación digital Vitónica, especializada en información de bienestar y salud.

Programa específico de alimentación

Otra de las claves para reducir la grasa abdominal es ingerir determinados alimentos. Lo ideal es que las comidas incluyan una gran cantidad de vegetales y verduras. En el caso de las proteínas, solo se debe ingerir carnes de pavo y pollo, así como pescado, precisa el portal Nutrición y Farmacia.

La recomendación es comer carbohidratos, siempre y cuando no sean procesados. Lo ideal es que las comidas tengan buen sabor y alto valor nutritivo, pero que la cantidad de calorías sea la menor posible. En la dieta podrían incluirse algunos productos que tienen propiedades reductoras, como la pimienta, que aumenta la capacidad del cuerpo para quemar grasas en estado de reposo, y la cayena, que posee capsaicina, elemento ideal para quemar grasas.

De la misma forma, este sitio web recomienda que bebidas como las cervezas, gaseosas y jugos procesados se eviten completamente.

Descansar lo suficiente

La relación entre un buen descanso y la disminución de grasa abdominal es clara. Cuando una persona no descansa lo suficiente, o incluso si duerme más de lo debido, el cuerpo pierde la regulación en la producción de glucosa, lo que influye en la ansiedad por comer alimentos con azúcar, o con alto contenido calórico. Esto es sobre todo negativo si ocurre durante la noche, momento en el que el cuerpo tiende a aumentar la cantidad de grasa más rápido que en el día.