Vida moderna
Azúcar en la sangre: el orden para consumir alimentos sin restricciones
Una dieta balanceada es fundamental para el tratamiento de la diabetes.
Sin importar qué tipo de diabetes tenga una persona, es importante tener una dieta equilibrada, teniendo en cuenta su enfermedad subyacente. Al momento de recibir este diagnóstico, se debe consultar con un nutricionista para recibir la asesoría profesional adecuada, según las necesidades individuales.
Según explica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el azúcar en la sangre se obtiene de algunos alimentos como son los carbohidratos. “Los alimentos con alto contenido de carbohidratos incluyen caramelos y dulces, refrescos, panes, tortillas y arroz blanco. Cuantos más carbohidratos consuma, mayor será su nivel de azúcar en sangre”.
Se debe moderar el consumo de los siguientes alimentos:
- Alimentos azucarados como dulces, galletas, pasteles, helados, cereales endulzados y frutas enlatadas con azúcar agregada.
- Bebidas con azúcares añadidos, como jugos, refrescos regulares y bebidas deportivas o energéticas regulares.
- Arroz blanco, tortillas, panes y pastas, especialmente los elaborados con harina blanca.
- Verduras con almidón, como papas blancas, maíz y guisantes.
Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro, dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, recomienda concentrar la dieta para diabéticos en los carbohidratos saludables, que incluyen:
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- Frutas.
- Vegetales.
- Cereales integrales.
- Legumbres, como frijoles y guisantes.
- Productos lácteos bajos en grasa, como leche y queso.
Sobre esa misma línea, la entidad de salud explica que la fibra alimenticia ayuda a moderar la forma en la que el cuerpo realiza la digestión y contribuye a regular los niveles de glucosa en la sangre:
- Vegetales.
- Frutas.
- Nueces.
- Legumbres, como frijoles y guisantes.
- Cereales integrales.
Mayo Clinic también menciona la importancia del pescado para la salud. Recomienda consumirlo mínimo dos veces a la semana. Lo ideal es no consumirlo frito. Los pescados como el atún y las sardinas se caracterizan por su contenido alto de ácidos grasos omegra-3, los cuales ayudan a la prevención de enfermedades cardíacas.
¿Cómo debe ser el orden para consumir los alimentos?
El Diario explica que la forma en la que se consumen los alimentos pude ayudar a disminuir el pico de la glucosa de la comida en 75 %, según la experta Jessie Inchauspe, autora de Glucose Revolution: The Life-Changing Power of Balancing Your Blood Sugar.
La experta señala que primero se deben comer las verduras, después las proteínas y grasas y finalmente los almidones y azúcares. Por ejemplo, verduras, luego pollo o pescado, después arroz y se termina el plato con el postre.
“También debe considerar que las bebidas azucaradas pueden afectar su nivel de azúcar en la sangre, por lo que es mejor dejarlas para un consumo al final. En su lugar puedes optar por otras bebidas saludables como agua (puede ser agua carbonatada), café y té sin azúcar”, explica El Diario.
Diabetes
Esta enfermedad consiste en tener niveles elevados de azúcar en el torrente sanguíneo. “La causa subyacente de la diabetes varía según el tipo. Pero, independientemente del tipo de diabetes que se tenga, puede provocar un exceso de glucosa en la sangre. Un nivel muy alto de glucosa en la sangre puede provocar problemas de salud graves”, explica Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
- Diabetes tipo 1: es la menos común. Se puede presentar en cualquier edad, pero la suelen padecer, por lo general, niños, adolescentes o adultos jóvenes. Se caracteriza por una producción deficiente de insulina, pues el cuerpo no produce o produce en cantidades mínimas.
- Diabetes tipo 2: es el más común. Por lo general, se presenta en la edad adulta (sobrepeso), sin embargo, en la actualidad se presenta cada vez más en los niños. En esta enfermedad el cuerpo es resistente a la insulina y no la usa como debería.
- Diabetes gestacional: aparece en el embarazo. Esta enfermedad aumenta el riesgo de que se presenten complicaciones en parto. Al mismo tiempo de que la madre y el hijo presenten diabetes de tipo 2 en un futuro.