Bazo inflamado: así se puede aliviar el dolor con remedios naturales

El bazo es un órgano ubicado en el lado izquierdo del cuerpo, justo debajo de la caja torácica. Muchas enfermedades, como infecciones, enfermedad hepática y algunos tipos de cáncer, pueden causar un aumento en el tamaño de este órgano, lo que se conoce como esplenomegalia.

Hace parte del sistema linfático y cumple funciones muy importantes como filtrar la sangre y mantener los glóbulos rojos, los blancos y las plaquetas saludables. También juega un papel importante en la función inmunológica del cuerpo, según la Biblioteca de Medicina de Estados Unidos.

La dilatación o agrandamiento del bazo normalmente no presenta síntomas. Generalmente, los especialistas lo detectan durante un examen físico de rutina. Cuando esto ocurre, su tratamiento se enfoca en la enfermedad oculta que puede estar causando este problema. La extracción quirúrgica del bazo dilatado generalmente no es la primera opción de tratamiento.

Aunque normalmente no hay señales de que este órgano esté dilatado, cuando se presentan se reflejan en un dolor o inflamación en el área superior izquierda del abdomen que puede extenderse al hombro izquierdo, sensación de saciedad sin haber comido o después de comer solo una pequeña cantidad como consecuencia del bazo dilatado que presiona tu estómago, anemia, fatiga, infecciones frecuentes y tendencia al sangrado.

Las causas de esta afección pueden ser variadas. Según el portal News Medical Life Sciences, en el listado de razones detrás de un bazo inflamado están enfermedades tales como la leucemia que puede ser linfocítica crónica, mielógena crónica y granular grande de la célula.

De igual forma, la persona puede estar presentando desordenes del almacenamiento del lípido tales como enfermedad de Gaucher o de la Niemann-Selección, infecciones virales, infecciones bacterianas agudas tales como endocarditis bacteriana o crónicas como malaria, sífilis, brucelosis y tuberculosis miliar.

También puede haber enfermedades del hígado tales como cirrosis, o trombosis de las venas, causando la obstrucción al flujo de sangre hepático y retrocediéndola hasta el bazo; además de anemia.

De acuerdo con información del portal Middlesexhealth.og, cualquier persona puede padecer de un bazo dilatado a cualquier edad, pero ciertos grupos tienen más riesgos de que esto les ocurra. Por ejemplo, los niños y los adultos jóvenes con infecciones como la mononucleosis, las personas que tienen la enfermedad de Gaucher, la de Niemann-Pick y muchos otros trastornos metabólicos hereditarios que afectan el hígado y el bazo y quienes viven o viajan a áreas donde la malaria es frecuente.

Si bien normalmente se trata de un padecimiento que requiere tratamiento médico dado que puede ser generado por una enfermedad compleja, hay algunos remedios caseros que pueden ayudar a aliviar la molestia y el dolor.

Una de las primeras recomendaciones está el manejo de una dieta saludable a base de verduras, frutas y caldos. Llevar una alimentación saludable y baja en grasas es clave como complemento a cualquier tratamiento médico que se siga para hacerle frente a esta afección.

De igual forma, es aconsejable beber abundante agua durante el día cuando el bazo se encuentra inflamado ya que esto ayuda a mantenerlo libre de toxinas y residuos que puedan comprometer su buena salud a corto y largo plazo, según información del portal Onsalus.com.

De igual forma, hay algunas infusiones depurativas, las cuales permiten eliminar toxinas del cuerpo y dejar los órganos libres de acumulaciones de desechos. Algunas de estas preparaciones, además, tienen propiedades antiinflamatorias.

Por ejemplo, la infusión de cola de caballo elimina toxinas, es antiinflamatoria y alivia los dolores abdominales que puede provocar el agrandamiento del bazo.

Otra es la de diente de león, la cual es diurética y depurativa, por lo que puede resultar efectiva para eliminar todas las toxinas acumuladas y combate la anemia, una condición asociada con la inflamación del bazo.

La infusión de ortiga tiene propiedades antiinflamatorias, aumenta la segregación de los jugos gástricos y favorece las digestiones.

También está la de té de manzano que ayuda a limpiar el sistema linfático y, por ende, a reducir la inflamación del bazo, mientras que la infusión de perejil favorece la eliminación de toxinas a través de la orina y mejora el tránsito intestinal.

El jugo de arándanos es recomendado para limpiar el bazo naturalmente y prevenir y tratar su inflamación. Por un lado, estos frutos tienen la propiedad de fluidificar la sangre y limpiar el sistema linfático y, por otro, favorece la limpieza de los órganos a través de la orina, lo cual es muy importante para prevenir infecciones bacterianas que pueden acabar dañando al bazo y ocasionando su agrandamiento.

Los expertos coinciden en que si bien estos remedios naturales pueden ayudar a prevenir o aliviar las molestias generadas por el bazo inflamado, lo ideal es consultar al médico para que valore las razones que pueden estar causando la afección e inicie un tratamiento especializado.