Calambres musculares: estos son los alimentos que ayudan a prevenirlos

Para combatir los calambres musculares existen algunos alimentos que, gracias a sus propiedades, ayudan a disminuirlos. Por ejemplo, el potasio y el calcio son componentes que ayudan a la prevención de esta molestia. El diario La Vanguardia los menciona:

• Banano: rico en magnesio, hierro, potasio y betacaroteno.
• Aguacate: gran fuente de magnesio. Es un alimento perfecto para combatir los calambres.
• Espinacas: ricas en calcio, el cual ayuda a la prevención de calambres musculares.
• Brócoli: fuente de calcio.
• Nueces: además de tener magnesio que benefician a los músculos, tienen efectos positivos para el cerebro.
• Almejas: ricas en potasio. Según destaca el sitio web este es el mejor mineral para combatir los calambres musculares.
• Cereales integrales: contienen magnesio, el cual contribuye a la salud del organismo y a sobrellevar los calambres.
• Los cereales integrales contienen magnesio que interviene en la regulación del sistema nervioso y de los músculos.
• Lácteos: el calcio de la leche y el yogur contribuye a la prevención de los calambres.

Causas

El uso excesivo de un músculo, deshidratación y la tensión muscular son algunas de las causas más comunes de los calambres musculares. Sin embargo, frecuentemente se desconoce su razón. Aunque esta molestia no suele ser una señal de alerta, en algunos casos puede estar asociado con enfermedades.

Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, las explica:

• Suministro de sangre inadecuado: el angostamiento de las arterias puede provocar un dolor similar a un calambre muscular, los cuales suelen presentarse al momento de realizar actividad física y finalizar después de ella. Esta enfermedad es la arterioesclerosis.
• Compresión de los nervios: la estenosis lumbar también puede ser una enfermedad asociada con los calambres musculares. Este dolor suele empeorar cuando se camina. “Caminar en una posición levemente flexionada (como cuando empujas un carrito de compras) puede mejorar o retrasar el comienzo de los síntomas”, explica la entidad sin ánimo de lucro.
• Disminución de minerales: cuando no hay suficiente cantidad de potasio, calcio o magnesio en la alimentación diaria, pueden presentarse calambres. Algunos medicamentos pueden provocar la disminución de estos minerales.

Medline Plus, el sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explica que los calambres musculares pueden ocurrir mientras se juega tenis, golf, bolos, natación o cualquier otro ejercicio. Asimismo, también puede ser causados por:

• Alcoholismo.
• Hipotiroidismo (tiroides hipoactiva).
• Insuficiencia renal.
• Medicinas.
• Menstruación.
• Embarazo.

¿Cómo aliviar los calambres musculares?

Frecuentemente, los calambres musculares que se presentan al hacer actividad física ocurren por deshidratación. En la mayoría de los casos, tomar agua los alivia. En otros, se puede recurrir a bebidas deportivas para recuperar los minerales perdidos.

La Biblioteca brinda otras recomendaciones para aliviarlos:

• Cambiar los entrenamientos y ajustarlos a las capacidades de resistencia que soporta cada persona.
• Beber mucho liquido al realizar ejercicio o practicar un deporte. Se recomienda el consumo de jugo de naranja y de banano, debido a su contenido alto de potasio.
• Hacer estiramientos para mejorar la flexibilidad.

Mayo Clinic también recomienda otras alternativas para aliviar los calambres musculares:

• Masajes y elongación: alargar el músculo acalambrado y frotarlo suavemente, para que se relaje. En caso de que se presente un calambre en la pantorrilla, se debe poner el peso en la pierna acalambrada y doblar ligeramente la rodilla. Si no se tiene la capacidad para levantarse, la persona puede sentarse en el piso o en una silla, con la pierna extendida (la que está afectada).
• Aplica calor o frío: para esto se recomienda utilizar una almohadilla de calor sobre los músculos que están tensos. Un baño de agua tibia o dirigir el chorro de una ducha caliente hacia la zona afectada también es una buena opción. La otra opción es masajear el músculo acalambrado con hielo.