Vida Moderna
Calentador de agua o ducha eléctrica: ¿cuál es la mejor opción en cuanto al costo y beneficio?
Al momento de elegir entre un calentador de agua y una ducha eléctrica, es importante considerar algunos aspectos clave.
En la búsqueda de una experiencia de baño cómoda y reconfortante surge un interrogante: ¿qué es mejor usar, un calentador o una ducha eléctrica? Ambas opciones tienen sus ventajas y consideraciones que vale la pena tener en cuenta.
Actualmente, los calentadores de agua tradicionales, de paso (que no almacenan agua y son medianos o pequeños) y los boiler (tanque que sí almacena agua), funcionan a gas o con electricidad. Los calentadores pueden ser más económicos a largo plazo, especialmente si se trata de un hogar con varios miembros, ya que permite tener agua caliente disponible en todo momento. Sin embargo, su instalación y mantenimiento, dependiendo el modelo del calentador, puede o no ser costoso.
Por otro lado, las duchas eléctricas son aparatos compactos que se instalan directamente en el baño. Estos equipos calientan el agua instantáneamente al pasar por un dispositivo de calentamiento eléctrico. Las duchas eléctricas son fáciles de instalar, no requieren un tanque de almacenamiento y ofrecen la ventaja de calentar el agua de manera rápida y precisa.
Sin embargo, a la hora de elegir entre un calentador y una ducha eléctrica, es importante considerar algunos aspectos clave:
Tendencias
- Consumo energético: Los calentadores de agua tradicionales pueden ser más eficientes a la hora de consumir energía en comparación con las duchas eléctricas, especialmente si se trata de sistemas de alta capacidad que sirven a múltiples puntos de uso, como el baño o la cocina. Las duchas eléctricas, por su sistema, siempre consumirán más en comparación de los calentadores eléctricos. Los calentadores a gas, por el contrario, son los que menos consumen.
- Costo de instalación: Los calentadores de agua tradicionales pueden requerir una instalación más compleja debido a la necesidad de un punto fijo para el de paso o de tanque y, en algunos casos, tuberías adicionales si se trata de construcciones más antiguas. Sin embargo, las edificaciones nuevas ya traen un espacio destinado para su instalación y no hay tubería a la vista. Por su parte, las duchas, aunque no requieren mayor instalación que conectarla a la fuente eléctrica, tiene una vida útil corta corta dependiendo la marca.
- Suministro de agua: Los calentadores de agua tradicionales pueden proporcionar un suministro constante de agua caliente, incluso si se usan múltiples puntos de uso. La ducha eléctrica, por su lado, requiere una presión constante para que mantenga la temperatura.
“En Colombia, aún son demandadas las duchas eléctricas, pero el sector de la construcción y la rápida urbanización con viviendas modernas, han acelerado el crecimiento de los calentadores de agua en el país. Por eso es importante tener portafolios más completos en calentadores a gas, eléctricos, acumulación, digitales y hasta con wifi”, asegura Eduardo Gidi, country manager de Rheem Colombia, empresa de suministro de calentadores.
Para tomar la mejor decisión, es importante tener en cuenta las necesidades específicas de cada hogar.
¿Bañarse con presión o sin presión de agua?
El rol de la presión del agua es vital al momento de obtener un baño relajante y placentero. Cañerías obsoletas o duchas viejas, son algunas de las razones que pueden generar duchas estresantes.
Muchas personas prefieren una ducha con presión, ya que el agua calienta más rápido para la premura del día a día; sin embargo, no es el único factor para tener en cuenta,
Es importante aclarar que, si el agua sale con mucha presión, puede lastimar la piel, pero ¿cómo saber si la presión de la ducha es la adecuada? De acuerdo con la compañía de plomeros del Reino Unido Anchor Pumps, puede saberlo de una forma sencilla.
Debe tomar una jarra con medidas y colocarla bajo el chorro abierto al máximo. Luego, cronometrar cuánto tiempo demora en llenar la jarra. Según Anchor Pumps, el tiempo necesario para llenar una jarra de un litro no debería superar los 6 segundos. Si demora más, entonces está teniendo problemas con la presión de agua.
“Una presión de agua inestable puede ser causada por varias razones, entre ellas por el sistema de cañerías, otra porque el cabezal de la ducha puede estar congestionado o por la configuración del cabezal de la ducha, entre otras”, explica, por su parte, Mauricio Castillo, del equipo de Rheem Colombia.
Para tener una ducha placentera, según Castillo, también puede tener en cuenta las condiciones de la ducha como el cabezal, es decir, por donde sale el agua. Este, por el tiempo de uso, se va tapando por el sarro, minerales o suciedad del agua. “Limpiar o cambiar el cabezal puede ayudar a restablecer la presión ideal”, añade.