Callos en los pies: remedios caseros que ayudan a suavizarlos

Los callos y callosidades son capas de piel engrosadas y estas son causadas por la repetitiva presión o fricción en el punto donde estas se presentan, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

No obstante, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explicó que los callos y las callosidades no son lo mismo.

• Los callos son más pequeños y más profundos que las callosidades y tienen un centro duro rodeado de piel inflamada. Pueden ser dolorosos cuando se ejerce presión sobre ellos. Los callos duros suelen formarse en la punta de los dedos de los pies o en el borde externo del dedo pequeño del pie. Los callos suaves tienden a formarse entre los dedos de los pies.

• Las callosidades no suelen ser dolorosas y tienden a formarse en lugares en los que se ejerce presión, como los talones, la parte anterior de las plantas de los pies, las palmas de las manos y las rodillas. Pueden tener diferentes tamaños y formas, y con frecuencia son más grandes que los callos.

Además, la entidad sin ánimo de lucro explica que la presión y la fricción causadas por acciones repetitivas hacen que los callos y las callosidades aparezcan y crezcan como, por ejemplo:

• Usar zapatos que no calzan bien. Los zapatos ajustados y de taco alto pueden comprimir algunas zonas del pie. Cuando el calzado queda flojo, el pie puede resbalarse varias veces y frotarse contra el zapato. El pie también puede frotarse contra una costura o una puntada que esté dentro del zapato.
• No usar medias. Usar zapatos sin medias puede producir fricción en los pies. Las medias que no se ajustan adecuadamente también pueden ser un problema.
• Tocar instrumentos musicales o utilizar herramientas manuales. Las callosidades en las manos pueden aparecer a causa de la presión reiterada que se ejerce al tocar un instrumento musical, al utilizar herramientas manuales o, incluso, al escribir.

Por tal razón, el portal La Vida Lúcida reveló algunos remedios caseros que ayudan a eliminar los callos y para el primero hay que remojar una tajada de pan con vinagre para ponerlo sobre el callo, envolverlo y esperar al día siguiente.

La segunda recomendación es poner durante varias noches la cáscara de un limón.

La otra sugerencia es poner en un frasco con vinagre una cebolla durante varios días, para después poner la cebolla en el callo y dejarla ahí durante la noche.

Ahora bien, para obtener mejores resultados lo ideal es raspar el callo con una piedra pómez o raspadores que ayudan a eliminar la piel seca.

No obstante, reveló que si un callo o una callosidad persiste o se vuelve doloroso, a pesar de los esfuerzos de cuidado personal, los siguientes tratamientos médicos pueden proporcionar alivio:

• Recortar el exceso de piel. El proveedor de atención médica puede reducir la piel engrosada o recortar un callo grande con un bisturí y lo anterior se puede hacer durante una consulta, pero lo debe realizar un experto, porque realizarlo en casa podría provocar una infección.
• Parches medicinales. El proveedor de atención médica también podría colocar un parche que contenga un 40 % de ácido salicílico (Clear Away, MediPlast, entre otros). Estos parches se venden sin receta médica, pero el proveedor de atención médica informará cada cuánto se debe reemplazar este parche. Adicional, se debe intentar reducir la piel engrosada con una piedra pómez, una lima de uñas o una lima de cartón antes de colocar un parche nuevo. Sin embargo, si se necesita tratar un área grande, se debe intenta con ácido salicílico de venta sin receta médica en gel (Compound W, Keralyt) o líquido (Compound W, Duofilm).

• Plantillas de zapatos. Si se tiene una deformidad subyacente en el pie, es posible que el proveedor de atención médica recete plantillas acolchadas para el calzado hechas a medida (órtesis) para evitar los callos o las callosidades recurrentes.
• Cirugía. Es posible que el proveedor de atención médica sugiera una cirugía para corregir la alineación de un hueso que cause fricción. Este tipo de cirugía se puede hacer sin una noche de hospitalización.

De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y, por ello, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.