Vida Moderna
Callos y pies resecos: cómo hidratarlos con aceite de oliva y vitamina E
Entre los principales motivos por los que aparecen los callos están el uso de calzado apretado, la falta de hidratación y no usar medias.
Los callos y callosidades son capas duras y gruesas de piel que aparecen cuando la piel intenta protegerse de la fricción y la presión, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Los callos son más pequeños que las callosidades y tienen un centro duro rodeado de piel inflamada. Los callos suelen desarrollarse en la parte de los pies que no soporta peso, como las puntas y los costados de los dedos e, incluso, entre los dedos. También pueden encontrarse en puntos que soportan peso. Los callos pueden ser dolorosos cuando se ejerce presión sobre ellos.
Algunas de las causas de los callos son usar zapatos que no calzan bien, pues los zapatos ajustados y de taco alto pueden comprimir algunas zonas del pie o no usar medias; además, usar zapatos sin medias puede producir fricción en los pies.
Por su parte, los pies secos se deben principalmente a una falta de hidratación y por ello para combatir las dos afecciones el portal mexicano RSVPOnline reveló una mascarilla natural con aceite de oliva y vitamina E. Para prepararla, se deben mezclar: una cucharada de aceite de oliva, una cucharada de manteca de cacao y el contenido de tres cápsulas de vitamina E. Posteriormente, cuando se consiga una pasta homogénea se aplica en los pies y se deja actuando la mezcla toda la noche.
El portal reveló otras recetas caseras para los pies, como la de pepino y limón. Para esta se necesitan dos pepinos pequeños, el jugo de un limón y tres cucharadas de aceite de oliva. En seguida, se deben mezclar todos los ingredientes y se separa en partes iguales en unas bolsas en donde se introducirán los pies y se esperarán diez minutos para finalmente, enjuagar con agua tibia.
Sobre la misma línea recomendó mezclar una cucharada de cúrcuma en polvo, una cucharada de harina de garbanzo, una cucharadita de leche y unas gotas de agua de rosas. Posteriormente, cuando los ingredientes estén integrados se debe aplicar la pasta conseguida en los pies y se deja actuando por 20 minutos.
Otra sugerencia es mezclar y aplicar en los pies por 30 minutos media taza de avena, dos cucharadas de miel y el jugo de un limón. No obstante, antes de retirar la pasta es importante asegurarse de que está seca por completo.
Existen varios remedios mecánicos para quitar los callos de los pies como las limas, la piedra pómez o raspadores que ayudan a eliminar la piel seca.
Existen formas para prevenir los callos, las callosidades y la resequedad en los pies:
- Utilizar zapatos que tengan amplio espacio para los dedos. Si no se pueden mover los dedos, los zapatos están muy ajustados y es mejor comprar zapatos de una talla más.
- Utilizar plantillas de venta libre. Utilizar una plantilla para proteger la zona donde apareció el callo o la callosidad. Tener cuidado al usar parches medicinales o líquidos para quitar callos de venta libre (sin receta). Estos contienen ácido salicílico que puede irritar la piel sana y producir una infección, especialmente, en personas que padecen diabetes u otras enfermedades que reducen la circulación de la sangre.
- Humectar la piel. Aplicarse crema hidratante en los pies para mantener la piel suave.
No obstante, hay que señalar que si un callo se vuelve muy doloroso o se inflama es importante consultar a un médico para que este examine los pies y descarte otras causas del engrosamiento de la piel, tales como verrugas y quistes.