¿Se puede prevenir el cáncer?

El cáncer se produce por un daño en el ADN, las instrucciones químicas que le indican a las células qué hacer en el organismo. Gracias a estudios científicos, los expertos hoy saben que el riesgo verdadero depende de una combinación de factores genéticos, medioambiente y estilo de vida. Por lo tanto, hablar de prevención en cáncer es totalmente posible.

La campaña para conmemorar el Día Mundial contra el Cáncer, que se celebra en febrero cada año, busca fomentar hábitos saludables. Se trata de un esfuerzo por bajar los índices de la enfermedad que actualmente en el mundo cobra la vida de 8,2 millones de personas, de las cuales 4 millones son prematuras pues tienen entre 30 y 69 años. Aunque las cifras de mortalidad global se han reducido en 25 por ciento debido a la detección temprana y a los avances en los tratamientos, se busca inculcar hábitos saludables para disminuir la cifra proyectada de aumento a diez años, que es de 14 millones de muertes al año.

Una de las herramientas preventivas es controlar el peso, ya que su exceso aumenta el riesgo de padecer varios tipos de cáncer como el de intestino, mama, útero, ovario, páncreas, esófago, riñón, hígado, próstata y vesícula biliar. Según John Duperly, experto en medicina del deporte, 30 minutos de actividad física diaria son suficientes para obtener los beneficios, pero sugiere combinar con componentes que aporten un efecto emocional como el baile.

Reducir el consumo de alcohol disminuye el riesgo de cáncer de faringe, boca, laringe, esófago, intestino, hígado y mama. Fumar causa varios tipos de cáncer en el mundo y mata por lo menos a 5 millones de personas al año, equivalentes al 22 por ciento de todas las muertes por esta dolencia. El exceso de sol contribuye a contraer cáncer de piel por lo que la gente debe tomar las medidas del caso, que incluyen usar protector así como evitar el sol entre once de la mañana y tres de la tarde, cuando sus rayos causan más daño.

Los riesgos también dependen del género. Por ejemplo, el cáncer de hígado es tres veces más frecuente en los hombres debido a la mayor incidencia en ellos del virus de hepatitis C, el tabaquismo y el alto consumo de alcohol. Los hombres también tienen cuatro veces más probabilidad de sufrir de cáncer de esófago, laringe y vejiga. También el melanoma tiene una incidencia 60 por ciento más alta en ellos.

Ciertas infecciones como la del VPH y la de la hepatitis C aumentan el riesgo de esta enfermedad y por eso se recomienda hacer pruebas para detectar la infección. En la hepatitis se trata de un examen de sangre y en el cáncer de cuello uterino es la citología.

Otra variable importante es recibir un diagnóstico oportuno. Según cifras de Gran Bretaña, en siete tipos de cáncer muy comunes como el de vejiga, intestino, mama, cérvix, melanoma, ovario y testículo, la supervivencia es mayor si se trata a tiempo. Para esto se requiere acceso al sistema de salud de modo que la gente pueda no solo hacerse chequeos periódicos, sino también acceder a tratamientos oportunos.