Vida moderna
Cáncer de piel: este es el factor de riesgo que pocos conocen
Es importante acudir al doctor periódicamente para revisar el estado de salud de la piel.
El cáncer es la causa principal de muertes en el mundo, según datos de la Organización Mundial de la Salud. Los médicos insisten en la importancia de realizar chequeos médicos regularmente para recibir un diagnóstico oportuno en caso de que se tenga alguno.
El cáncer puede originarse en cualquier parte del cuerpo, incluyendo la piel. Existen tres tipos de cáncer de piel: carcinoma basocelular, carcinoma espinocelular y melanoma.
“Los carcinomas de células basales y de células escamosas son dos de los tipos más comunes de cáncer de piel. Comienzan, respectivamente, en las capas basales y escamosas de la piel. Por lo general, ambos se pueden curar, pero pueden desfigurar y ser muy costosos de tratar”, explican los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Por su parte, el melanoma es el tercer tipo de cáncer de piel y es el que causa mayor número de muertes, ya que tienen una tendencia alta a diseminarse a otras partes del cuerpo, incluyendo los órganos vitales.
Tendencias
La exposición solar es uno de los principales factores de riesgo para padecer cáncer de piel. Aunque tomar sol moderadamente es bueno para la producción de vitamina D, cuando hay una sobreexposición los rayos ultravioleta pueden penetrara la piel y dañar las células.
“Las quemaduras de sol son un signo de daño en la piel. El bronceado tampoco es saludable. Aparece después que los rayos del sol ya mataron algunas células y dañaron otras. Los rayos UV pueden causar lesiones en la piel durante cualquier estación del año y a cualquier temperatura. También pueden causar problemas en los ojos, arrugas, manchas en la piel y cáncer de piel”, explican los expertos de Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Además de los rayos solares, existen otros factores que incrementan el riesgo de padecer este tipo de cáncer. Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) explican que “el riesgo de melanoma es mayor si los miembros de su familia han tenido cáncer de piel o si usted ya ha tenido melanoma u otros cánceres de piel. Un importante factor de riesgo de melanoma es tener una gran cantidad de lunares, o grandes lunares planos con formas irregulares. Las quemaduras de sol, especialmente durante la infancia, también pueden aumentar el riesgo de melanoma”.
Carcinoma de células basales
En este tipo de cáncer de piel, generalmente, los carcinomas de células basales se forman en áreas del cuerpo que, generalmente, están expuestas a sol, como el cuello y el rostro.
Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación menciona algunos de los síntomas de este tipo de cáncer de piel:
- Un bulto ceroso o perlado.
- Una lesión plana, parecida a una cicatriz marrón o del color de la piel.
- Una úlcera con costras o sangrante que se cura y regresa.
Carcinoma espinocelular
Generalmente, se produce en el rostro, las orejas y las manos, que son parte expuestas al sol. Según explica la entidad sin ánimo de lucro, las personas con piel más oscuras son más propensas a a desarrollar este cáncer de piel en zonas que no están expuestas al sol.
El carcinoma espinocelular puede desarrollarse como:
- Un nódulo rojo y firme.
- Una lesión plana con una superficie escamosa y con costras.
Melanoma
Este cáncer de piel puede formarse en cualquier zona del cuerpo. También puede desarrollarse en un lunar, que se vuelve canceroso. Generalmente, en los hombres, aparece en el rostro o tronco; y en las mujeres, en la parte inferior de las piernas. En ambos casos, este cáncer puede desarrollarse en zonas del cuerpo que no son expuestas al sol.
Algunas de las señales del melanoma son:
- Un área grande y amarronada con pintitas más oscuras.
- Un lunar que cambia de color, tamaño o sensación, o que sangra.
- Una lesión pequeña con un borde irregular y partes que aparecen de color rojo, rosa, blanco, azul o azul oscuro.
- Una lesión dolorosa que pica o arde.
- Lesiones oscuras en las palmas de las manos, las plantas de los pies, las yemas de los dedos de las manos o los pies, o en el recubrimiento de las mucosas de la boca, la nariz, la vagina o el ano.