SALUD

Cáncer de riñón: estos son los síntomas que alertan de la enfermedad

El desarrollo de esta enfermedad es más frecuente en las personas adultas.

26 de diciembre de 2022
Expertos aconsejan llevar una dieta baja en sal y tomar líquidos para prevenir los cálculos renales. Foto: Getty images.
Expertos aconsejan llevar una dieta baja en sal y tomar líquidos para prevenir enfermedades en los riñones. Foto: Getty images. | Foto: Foto: Getty images.

El cáncer de riñón es una enfermedad cuyo desarrollo inicia en estos órganos, que se encuentran adheridos a la pared superior trasera del abdomen y están protegidos por las costillas, precisa la Sociedad Americana del Cáncer.

Los riñones, al igual que la mayoría de órganos del cuerpo, cumplen funciones clave para el buen funcionamiento del organismo. Una de las más importantes es filtrar y mantener la sangre libre de productos de desecho y toxinas.

En los adultos, el carcinoma de células renales es el tipo más común de cáncer de riñón. Los niños pequeños son más propensos a desarrollar uno llamado “tumor de Wilms”, explica el instituto de investigaciones Mayo Clinic.

Las estadísticas indican que aproximadamente siete de cada 10 personas adultas con carcinoma de células renales tiene este tipo de cáncer. Cuando se examinan en el laboratorio, las células que conforman el carcinoma renal de células claras lucen muy pálidas o claras.

Limpieza de riñones
El cáncer de riñón es una enfermedad que se origina en estos órganos. Foto: Getty Images. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Información del portal Cinfasalud, de España, indica que el cáncer de células renales es responsable de un 2 a 3 % de todos los tumores malignos en los adultos y es dos veces más frecuente en hombres que en mujeres.

Las células cancerosas en el riñón pueden viajar a los huesos y crecer allí. A esta propagación se le llama metástasis. Estas células en el nuevo sitio serán idénticas a las del riñón, precisan los expertos.

Síntomas

Esta es una enfermedad que no suele tener signos o síntomas en sus primeras etapas, pero pueden desarrollarse con el paso del tiempo y son los siguientes.

  • Sangre en la orina, la cual puede verse de color rosa o roja.
  • Dolor en la espalda o en el costado que no desaparece.
  • Pérdida del apetito.
  • Pérdida de peso sin causa aparente.
  • Cansancio.
  • Fiebre.

Factores de riesgo

La ciencia no ha establecido las causas por las cuales se desarrolla esta enfermedad; sin embargo, sí se han determinado algunos factores que pueden aumentar el riesgo de presentarla.

  • Edad avanzada. El riesgo de desarrollar este padecimiento aumenta con la edad.
  • Tabaquismo. Las personas que fuman presentan un riesgo más alto de tener cáncer de riñón que aquellas que no consumen tabaco. La probabilidad disminuye cuando la persona deja de fumar.
  • Obesidad. Quienes son obesos tienen mayor posibilidad de desarrollar esta afección que los que tienen un peso saludable.
  • Presión arterial alta (hipertensión). La presión arterial alta aumenta el riesgo de tener cáncer de riñón.
  • Tratamiento de la insuficiencia renal. Las personas que reciben diálisis a largo plazo para tratar la insuficiencia renal crónica corren más riesgo de tener cáncer de riñón.
Los cálculos de calcio son los más comunes que afectan a los riñones. Foto: Getty Images.
El cáncer de riñón es más frecuente en los hombres que en las mujeres. Foto: Getty Images. | Foto: Foto: Getty Images.
  • Ciertos síndromes heredados. Las personas que nacen con ciertos síndromes heredados pueden tener un mayor riesgo de presentar cáncer de riñón, como quienes tienen la enfermedad de von Hippel-Lindau, el síndrome de Birt-Hogg-Dube, el complejo de esclerosis tuberosa, el carcinoma hereditario de células renales papilares o el cáncer renal familiar.
  • Antecedentes familiares de cáncer de riñón. El riesgo de cáncer de riñón es mayor si los familiares cercanos han tenido la enfermedad.

¿Cómo prevenirlo?

De acuerdo con los expertos, tomar medidas para mejorar tu salud ayuda a reducir el riesgo de padecer esta afección y estas son algunas de ellas:

  • Dejar de fumar.
  • Mantener un peso saludable. Lo ideal cuando se está pasado de kilos es tratar de reducir las calorías que se consumen al día e intentar estar físicamente activo la mayoría de los días de la semana.
  • Controlar la presión arterial. Medidas relacionadas con el estilo de vida, como hacer ejercicio, bajar de peso y realizar cambios en la dieta, pueden ayudar. Adicionalmente, hay ocasiones en las que es posible que algunas personas tengan que recurrir a los medicamentos para controlar esta afección.