Vida Moderna
Ceguera y visión borrosa: cómo prevenirlas de manera natural
La pérdida de la visión se refiere a la pérdida parcial o completa de esta.
Los ojos son una parte muy importante de la salud y por ello existen hábitos saludables que previenen algunas enfermedades para evitar la pérdida de visión, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Hay que señalar que la pérdida de la visión se refiere a la pérdida parcial o completa de esta. Tal pérdida de la visión puede suceder de manera repentina o con el paso del tiempo y algunos tipos de pérdida de la visión nunca llevan a ceguera completa.
Asimismo, la biblioteca explicó que la pérdida de la visión tiene muchas causas:
- Accidentes o lesiones a la superficie del ojo (quemaduras químicas o lesiones en deportes).
- Diabetes.
- Glaucoma.
- Degeneración macular.
El tipo de pérdida de la visión parcial puede variar según la causa:
- Con cataratas, la visión puede estar nublada o borrosa y la luz brillante puede causar resplandor.
- Con diabetes, la visión puede ser borrosa, puede haber sombras o áreas de visión faltantes y dificultad para ver en la noche.
- Con glaucoma, puede haber estrechamiento concéntrico del campo visual y áreas de visión faltantes.
- Con la degeneración macular, la visión lateral es normal, pero la visión central se pierde lentamente.
Otras causas de pérdida de la visión incluyen:
- Obstrucción de los vasos sanguíneos.
- Complicaciones de nacimiento prematuro (fibroplasia retrolenticular).
- Complicaciones de cirugía de los ojos.
- Ojo perezoso.
- Neuritis óptica.
- Accidente cerebrovascular.
- Retinitis pigmentaria.
- Tumores como retinoblastoma y glioma óptico.
La ceguera total (no percepción de la luz) se debe a menudo a:
- Traumatismo o lesión grave.
- Desprendimiento completo de la retina.
- Glaucoma en etapa final.
- Retinopatía diabética en etapa final.
- Infección ocular interna grave (endoftalmitis).
- Oclusión vascular (falta de flujo sanguíneo en el ojo).
Por ende, la biblioteca reveló varias recomendaciones para el cuidado de los ojos:
1. Comer una dieta saludable y equilibrada: La dieta debe incluir bastantes frutas y verduras, especialmente verduras amarillas y de hojas verdes. Comer pescado rico en ácidos grasos omega-3, como el salmón, el atún y el fletán (halibut), también puede beneficiar a los ojos.
2. Mantener un peso saludable: Tener sobrepeso u obesidad aumenta el riesgo de desarrollar diabetes. La diabetes pone en mayor riesgo de contraer retinopatía diabética o glaucoma.
3. Hacer ejercicio regularmente: El ejercicio puede ayudar a prevenir o controlar la diabetes, la presión arterial alta y el colesterol alto. Estas enfermedades pueden conducir a algunos problemas del ojo o de la visión.
4. Usar gafas de sol: La exposición al sol puede dañar los ojos y aumentar el riesgo de cataratas y degeneración macular relacionada con la edad. Por ende hay que proteger los ojos con gafas de sol que bloqueen el 99 al 100 % de la radiación UVA y UVB.
6. Conocer el historia clínica familiar: Algunas enfermedades oculares son hereditarias, por lo que es importante averiguar si alguien en la familia las ha tenido. Esto puede ayudar a determinar si se está en mayor riesgo de desarrollar alguna.
7. Conocer otros factores de riesgo: A medida que envejece, se está en mayor riesgo de desarrollar enfermedades y afecciones a los ojos relacionadas con la edad. Es importante conocer los factores de riesgo, ya que pueden reducirse si se cambian algunos hábitos.
8. Si se usan lentes de contacto, tomar medidas para prevenir infecciones oculares: Lavarse bien las manos antes de ponerse o quitarse los lentes de contacto. Seguir las instrucciones sobre cómo limpiarlos correctamente y reemplazarlos cuando sea necesario.
9. Dar a los ojos un descanso: Si se pasa mucho tiempo frente a una computadora, se puede olvidar parpadear, lo que puede cansar a los ojos. Para reducir la fatiga ocular, se puede probar la regla 20-20-20: Cada 20 minutos, desviar la vista unos seis metros hacia adelante por 20 segundos.
Asimismo, los expertos recomiendan tapar un ojo con la palma de la mano sin generar presión y con el ojo que está destapado ver objetos por un par de minutos y después cambiar de ojo. Esto se puede realizar al final del día.