Salud
Cerca del 30 % de hospitalizaciones por influenza corresponden a pacientes diabéticos
La influenza sigue siendo uno de los mayores desafíos de salud pública del mundo, con mil millones de casos a escala global anualmente.
Si bien la influenza puede afectar a toda la población, en los últimos años se ha notificado que cerca del 30 % de los adultos hospitalizados con influenza tenía diabetes. Basándose en esta tendencia, el médico Luis Jorge Hernández, director de Investigaciones de la Facultad de Medicina de la Universidad de Los Andes, explica que dichos pacientes son un grupo vulnerable y el riesgo aumenta con la edad.
El experto afirma que por esto los adultos mayores, que padecen esta enfermedad crónica, son los más propensos a presentar complicaciones tales como neumonía, bronquitis, empeoramiento de la enfermedad y condiciones cardiovasculares graves, que pueden derivar en hospitalizaciones e incluso la muerte.
La vacuna contra influenza puede reducir en un 25 % la mortalidad, y hasta en un 79 % el riesgo de hospitalización, así como la posibilidad de desarrollar eventos macrovasculares como infarto agudo de miocardio, accidentes cerebrovasculares y agudización de falla cardiaca, asociados a la influenza.
Tendencias
Hernández indica que, para evitar complicaciones graves por la influenza, se deben incluir vacunas más modernas y con mayor innovación en las estrategias anuales de inmunización.
En tal sentido, con relación a la vacunación contra la influenza, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la aplicación de la vacuna trivalente y tetravalente, de acuerdo con las cepas de mayor circulación en la temporada 2022.
El director asevera que es sumamente importante poner a disposición de toda la población la vacuna tetravalente, ya que ofrece una protección contra cuatro tipos de virus, es altamente eficaz, reduce complicaciones graves como la neumonía y es segura tanto para niños como para adultos, pacientes con enfermedades crónicas y personas de la tercera edad.
“Estudios han evidenciado que incluir la vacuna tetravalente contra la influenza en el Plan Ampliado de Inmunización (PAI) genera eficiencias al Estado, porque reduce el costo por la atención de cada paciente hasta en 767.601 pesos, y en el caso de aquellos con diabetes el ahorro sería mayor, debido a que la atención de estas personas es entre dos y tres veces más costosa”, dijo el médico.
Cabe mencionar que, a escala global, los gastos de salud para la diabetes se calculan en 760.000 millones de dólares, y se pronostica que este número aumente a unos 825.000 millones para el 2030, y a 845.000 millones para el 2045.
El doctor Hernández reitera que, además de reducir la carga de la enfermedad, mejorar la calidad de vida y disminuir la mortalidad de los pacientes, también es indispensable ampliar las coberturas de vacunación en los grupos poblacionales que se vieron más afectados a raíz de la pandemia. Y para poblaciones de riesgo las tasas de inmunización contra la influenza deberían superar el 75 %.
Diabetes e influenza en Latinoamérica
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), aproximadamente 62 millones de personas en la región tienen diabetes mellitus (DM) tipo 2, y la mayoría vive en países de ingresos medianos y bajos. Además, cada año se atribuyen a esta enfermedad más de 244.000 muertes en las Américas, y más de un millón y medio en todo el mundo.
Por otro lado, la influenza sigue siendo uno de los mayores desafíos de salud pública del mundo. Anualmente se dan mil millones de casos a escala global, de los cuales tres a cinco millones son graves, lo que resulta en 290.000 a 650.000 muertes respiratorias relacionadas con esta infección. En el contexto de la covid-19, estas cifras pueden aumentar e incluso producirse una “doble pandemia”.
Enfermedades cardiovasculares e influenza
Un estudio presentado en el Congreso Europeo de la Sociedad de Cardiología en el 2021 concluyó que la vacuna contra la influenza reduce el riesgo de muerte en pacientes que han tenido, recientemente, un infarto de corazón o enfermedad coronaria de alto riesgo.
“La vacunación anual contra la influenza debe ser parte del control habitual, no solo de este grupo sino de quienes padecen otras enfermedades cardiovasculares como hipertensión, isquemia cerebral, angina de pecho e insuficiencia cardíaca”, agrega el experto.