Chicle: así se debe consumir para suprimir antojos y bajar de peso

En la época actual es común la puesta en marcha de múltiples dietas para perder peso. Pese a ello, llevar a cabo estrategias sencillas que estén al alcance de todas las personas, también puede funcionar.

Diferentes estudios científicos han avalado la eficacia de algunas formas de adelgazar sin tener que hacer dieta, realizar grandes sacrificios o ponerse en situaciones complicadas, estas son:

Beber agua

Beber agua antes de comer es una de las formas de adelgazar sin hacer dieta, ya que produce la sensación de estómago lleno y puede implicar, por tanto, comer menos.

Según un estudio, beber medio litro de agua unos 30 minutos antes de comer puede ayudar a reducir el hambre y perder peso.

“Cuando se combina con una dieta hipocalórica, consumir 500 ml de agua antes de cada comida principal conduce a una mayor pérdida de peso que una dieta hipocalórica sola en adultos de mediana edad y ancianos”, concluyen los investigadores.

Masticar chicle

Mascar chicle por sí mismo no adelgaza, pero puede ser una estrategia útil para contribuir a comer menos.

Lo anterior, teniendo en cuenta que varias investigaciones han confirmado que “masticar un chicle sin azúcar y con un sabor muy intenso entre horas o antes de las comidas puede ayudar a calmar el apetito, reducir el antojo y picar menos entre horas”.

Masticar y comer más despacio

De acuerdo con Lina Robles, jefa del Servicio de Nutrición y Dietética del Hospital Universitario La Zarzuela, en el blog médico de Sanitas, “comer demasiado deprisa es malo a la hora de hacer la digestión, y además favorece la aparición de problemas de salud”.

Por el contrario, masticar lento y comer más despacio ayuda a alcanzar la sensación de saciedad, es decir, la señal de que la persona ya ha comido suficiente y debe parar, explica la experta.

Esto implica consecuencias como tomar las raciones adecuadas y, por tanto, consumir menos cantidad de comida, además de ayudar a controlar el peso.

Asimismo, supone beneficios para la digestión, mantener controlada la glucemia y mejorar la dentadura.

Utilizar un plato más pequeño

Sumado a los consejos anteriores para perder peso sin hacer dieta, se encuentra el truco de utilizar platos más pequeños.

Esto permite ‘engañar’ a la mente, ya que ante los ojos habrá un plato lleno de comida, pero una ración más pequeña.

Dormir bien y descansar

Un cuerpo y cerebro sin energía demandarán más calorías para compensarlo. Por eso, es clave dormir bien y estar descansados para controlar el peso y adelgazar, o no engordar más allá de lo saludable.

De acuerdo con datos publicados en el blog de Decathlon, “dormir no solo permite funcionar mejor al cuerpo y la mente, sino que además es un proceso durante el cual también se queman calorías, y no tan pocas como puede pensarse”.

La privación de sueño, el cansancio y el estrés pueden dar lugar a la sensación de hambre y los antojos, lo que lleva a comidas descontroladas y a una mayor ingesta de calorías.

Comer sin distracciones

En el siglo XXI con protagonismo de las redes sociales, internet y los smartphones es habitual ver a la gente comer mientras usa el móvil. Esta suele ser una práctica habitual, pero no saludable.

Más allá de las implicaciones a nivel social, comer y utilizar el celular al tiempo reduce las interacciones en persona. Por el contrario, comer atento a los alimentos puede influir sobre el control del peso, pues las distracciones provocan que se pierda la noción de lo consumido.

Un estudio concluyó que “es probable que la alimentación atenta influya en la ingesta de alimentos”, y “proporciona un enfoque novedoso para ayudar a perder y mantener el peso sin la necesidad de contar las calorías de forma consciente”.