Científicos explicaron los nuevos beneficios de convivir con un perro o un gato

Si bien es cierto que los perros son una compañía para el ser humano, los gatos no se quedan atrás, puesto que estos felinos han conseguido popularidad para ser parte de muchos hogares en el mundo.

De acuerdo con la Asociación Estadounidense del Corazón (AHA por sus siglas en inglés) las personas que conviven con un canino, generalmente son más saludables, puesto que estas mascotas les brindan fidelidad, incondicionalidad y cariño, entre otros.

Incluso asegura que son una buena compañía porque “el vínculo con una mascota, ayuda a que no se sienta sola. Cuando las personas ven, tocan, escuchan a sus animales de compañía o hablan con ellos, esto aporta un sentimiento de buena voluntad, alegría, cariño y felicidad”, puntualiza.

Por su parte, la organización AARP, menciona que algunos estudios señalan que la interacción con caninos incrementa los índices de oxitocina con solo acariciarlos o mirarlos. Por esto, cita una investigación publicada por la revista Journal of Community and Supportive Oncology que concluye que las visitas de un perro con fines terapéuticos, sí mejora la calidad de vida de pacientes con cáncer.

Lo anterior lo corrobora los National Institutes of Health (NIH) que en un informe afirman que “la interacción con animales disminuye los niveles de cortisol (una hormona relacionada con el estrés) y disminuye la presión arterial”.

Asimismo, cita a Rebecca Johnson, directora del Research Center for Human-Animal Interaction en la Facultad de Medicina Veterinaria de University of Missouri, quien precisa que los animales indirectamente pueden ayudar a su dueño a apreciar o valorar lo que hay en su entorno, es decir, la naturaleza, como por ejemplo, en los paseos diarios, puesto que dejan a un lado los elementos distractores como lo son los dispositivos móviles.

Nuevos beneficios de convivir con un perro o un gato en el hogar

Un grupo de científicos del Centro Regional de Fukushima para el Estudio del Medio Ambiente y la Infancia de Japón, realizó un estudio publicado en ‘Plos One’ basado en datos de más de 66.000 menores de edad del Japan Environment and Children’s Study, donde se encontraron y cruzaron variables sobre la interacción con animales domésticos y las alergias alimentarias, menciona Infosalus.

La investigación determinó que por lo menos los niños que estuvieron expuestos a perros hogareños tenían un nivel de bajo riesgo de alergia al huevo y a la leche; mientras que los menores que tuvieron una interacción con gatos tenían un menor índice de desarrollar alergia al trigo, al huevo y a la soja. No obstante, Infosalus menciona que el texto científico precisa que los niños expuestos a hámsteres elevaron las posibilidades de una alergia a los frutos rojos.

Y aunque los expertos aseguran que la investigación no puede afirmar contundentemente que la interacción con animales es causal sobre alergias alimentarias, si puede ser una guía para nuevos hallazgos.

¿Qué son las alergias alimentarias?

De acuerdo con la Clínica Mayo, las alergias aparecen como reacción del sistema inmune ante algún agente extraño que se considera perjudicial para el organismo. Aunque no tiene cura, algunos cuidados y prevenciones pueden evitar complicaciones.

La entidad de investigación y salud señala que no solo la inflamación de la piel es el único signo de alergia, también se pueden ver afectados en algunos casos las vías respiratorias y hasta el aparato digestivo. Esto significa que una persona que tenga alergia alimentaria, no experimentará necesariamente los mismos síntomas que otra que tenga una reacción desfavorable tras la ingesta de medicamentos, por ejemplo.

Una alergia de alimentos después de consumir pescados o mariscos puede causar comezón, pero no se debe subestimar ninguna señal que envíe el cuerpo porque una persona puede perder hasta la vida debido a estas reacciones, por lo que se recomienda siempre asistir a un centro médico.