Cinco consejos para convertirse en un mejor padre

Todos nos preocupamos por ser buenos padres, En efecto, los progenitores siempre están en una lucha interna constante por darles su espacio e independencia para que tengan lo que necesitan. Aquí hay cinco maneras de convertirse en esa persona que los guía y educa a la vez que los hace más felices.

1. Tome en cuenta los intereses y destrezas de sus hijos

Demuestre interesado en el deporte que practica o en algún área académica que él hace de manera excelente pues así le muestra a su hijo que él le importa a usted de verdad. Al poner atención a los intereses y deseos de sus hijos usted está nutriendo la relación padre e hijo de una manera muy provechosa para ambos. Igualmente, el padre y la madre al conocer las destrezas e intereses de sus hijos los van a comprender mejor y van a entender también cuáles son sus necesidades.

2. Aprenda a escuchar cuando su hijo hable

En este punto lo importante es escuchar sin interrumpir y sin juzgar, es muy importante el no juzgar ya que poco a poco se desarrolla una confianza con su hijo que hará que el le siga contando cosas íntimas e importantes de su vida. También es esencial que haya la escucha reflectiva donde el niño sienta que lo que dice es validado y comprendido por sus padres. Un ejemplo sería decirle: "sí, yo entiendo lo que estas sintiendo.

3. Mire los problemas desde la perspectiva de su hijo

y no solo de la suya como padre o madre. Nuestros hijos van a tener otro punto de vista en muchos temas. Esto es difícil para los padres de entender y aceptar, pero los hijos tienen ideas propias. Aquí el secreto nuevamente es validar lo que el hijo o la hija expresa, ya que es muy frustrante para los hijos no sentirse validado por sus padres. El padre o la madre solo deben decir que lo entienden, aunque no esté de acuerdo.

4. Demuéstrele empatía de manera frecuente

Resulta importante entender el porque hicieron algo. En ese sentido ponerse en los zapatos de sus hijos va a ser crucial solo a través de la empatía. Los padres verán el por qué de la conducta de sus hijos o la razón de su comportamiento. Aquí es importante realmente ponerse en la situación del niño y acordarse de cuando teníamos esa misma edad y tratar de pensar igual a él. Esto sirve para mejorar la comunicación y resolver cualquier dificultad. No siempre las cosas se darán bien, se verán errores de ambos lados y en dichos momentos es esencial que los padres tengan en cuenta que sus hijos nos necesitan y no tienen que ser perfectos sino comprensivos y amorosos.

5. Recuerde que ellos están creciendo

Es importante recordarle al padre que los hijos no tienen ni la madurez ni la experiencia ni la sabiduría de ellos. De ahí es que los padres ejerzan la paciencia. Todo esto es parte de la madurez. Nunca se le olvide que ellos, al ser sus hijos, los ven a ustedes como los guías que van mostrando el camino a seguir. Ustedes pueden y deben ser unos buenos guías dado su rol de adultos formadores.