Cinco malos hábitos que pueden dañar los dientes en poco tiempo

Cuidar los dientes no es solo cuestión de estética, sino de salud. Sin embargo, aún hay quienes ignoran los cuidados que requieren y, lo que es peor, se olvidan que como cualquier otra parte del cuerpo humano, merecen ser revisados frecuentemente por un especialista.

Cocó March, especialista en medicina integral, naturopatía y nutrición publicó en su página web cinco malos hábitos que para nada ayudan a los dientes. Fisuras, presencia de bacterias y daños en el esmalte, entre las afecciones que pueden ocasionar. A continuación, cuáles son:

1. Usar palillos de dientes

Una práctica que puede llevar al daño prematuro de los dientes es el uso después de las comidas, con la intención de retirar la comida que queda atascada.

Los palillos, cuando son mal utilizados, pueden desencadenar pequeñas hemorragias en las encías, y, además, el deterioro del esmalte de los dientes, lo que a su vez genera hipersensibilidad, tanto a los alimentos calientes como fríos.

Otro problema con los palillos es que normalmente están expuestos y al alcance de las manos de todo el mundo, en especial en los restaurantes, por lo que no están exentos de propagar bacterias cada que son llevados a la boca.

2. El consumo de dulces y gaseosas

No es malo comer un dulce o tomar una bebida carbonatada de vez en cuando, pero hacerlo con frecuencia puede afectar la dentadura. ¿Por qué? En el caso de las gaseosas, puede corroer el esmalte de los dientes debido a su ácido fosfórico y ácido cítrico.

En el caso de los dulces (aunque también aplica para las gaseosas), su contenido de azúcar puede propiciar la aparición de bacterias que provocan la caries. Por si fuera poco, están relacionados con la aparición de placa dental.

3. Dar a los dientes un uso inadecuado

Es usual ver a algunas personas utilizando los dientes para destapar empaques, retirar las tapas de las botellas y morder bolígrafos (quizá producto de la ansiedad), acciones que también pueden afectar su salud.

Usar los dientes como herramientas puede llevar a que se fisuren, se partan e incluso sufran una lesión de raíz. Pero las afecciones no solo pueden dificultar la mordida, sino afectar el autoestima de quienes sufren daños, aún más si los afectados son los incisivos.

4. No visitar al odontólogo

Pese a la importancia de los dientes, hay quienes no son conscientes de ella, de ahí que pasen incluso años sin visitar al dentista. Pues bien, pedir citas con un odontólogo para una limpieza general, por ejemplo, evitará complicaciones en salud por cuenta de acumulación de placa y la aparición de caries.

Así mismo, acudir a un consultorio odontológico podría ayudarte a tratar a tiempo la inflamación en las encías debido a la aparición de algunas bacterias.

5. No cepillar los dientes bien

Cuando se trata de cepillar los dientes no hay que dar nada por sentado. Por ejemplo, hay quienes desconocen que hacerlo inmediatamente después de comer puede generar daños y afectar el esmalte.

La acidez, al parecer, reblandece el esmalte de los dientes, y al cepillarlos después de comer, se ayuda a propagar el ácido por toda la boca. De ahí que una recomendación de los especialistas sea esperar un tiempo prudencial.

Al no cepillar los dientes inmediatamente, se da tiempo a la saliva para que contenga el efecto del ácido que aparece especialmente cuando se consume azúcares. Otra opción puede ser enjuagar la boca con agua antes de cepillarlos.

La recomendación, por supuesto, es usar seda dental para retirar los alimentos que se quedan entre dientes y enjuague bucal para deshacerse de la placa que puede acumularse en las encías, de acuerdo con Cocó March.