Cloruro de magnesio para adelgazar, ¿cómo tomarlo?

Es común que a la hora de buscar desaparecer algunos kilos de más, se busquen alternativas para solucionar dicho exceso de peso, y esto no necesariamente tiene que ver con la estética o algún canon de belleza, sino más bien con la salud de las personas, entendiendo que en algunos casos, el sobrepeso puede traer consigo el inicio de algunas enfermedades que afectan gravemente la vida.

Si bien no suena como algo común, el magnesio sí es importante durante el proceso de bajar de peso, puesto que su carencia puede llevar incluso a sufrir de obesidad, razón por la cual es fácil encontrarlo dentro de suplementos alimenticios que se usan para agregar nutrientes a la dieta o simplemente reducir el riesgo de contraer enfermedades o demás padecimientos.

Sin embargo, lo importante no solo es ingerirlo, sino también saber cómo hacerlo de manera correcta para que este cumpla sus funciones y se pueda lograr el objetivo planteado sin poner en juego la salud con efectos indeseados. Es de recalcar la importancia de acudir en primera instancia a un médico profesional que determine las necesidades alimenticias que se tengan y de qué manera resolverlas.

En ese sentido, la ingesta de este compuesto mineral iónico a base de cloro tiene múltiples beneficios que incluyen la reducción del estómago. El aumento desmedido de peso se debe al consumo excesivo de comida, lo que genera que el estómago se amplíe; por ello, es muy recomendable su consumo como complemento para controlar el tamaño de este órgano, mientras contribuye significativamente al buen funcionamiento del organismo, de nervios y de músculos.

Para esto, como se mencionó anteriormente, estos beneficios aparecerán en la medida en que se consuma de la manera correcta en forma de complemento, siguiendo las cantidades recomendadas, que son de 3 gramos de cloruro de magnesio por cada 100 cm³ de agua, luego de haber desayunado para intensificar sus efectos positivos en el organismo.

Su preparación consta de disolver en un litro de agua, lo más preciso que se pueda 30 g de cloruro de magnesio cristalizado, para luego dejar refrigerando durante algún tiempo antes de tomarlo en horas de la mañana, acompañado, por supuesto, de una dieta saludable y la actividad física necesaria para mantener el cuerpo sano y alejado de los daños que provoca el sedentarismo a largo plazo.

De hecho, sus efectos pueden llegar a ser aún más notorios si dentro de la dieta se incluyen alimentos con grandes propiedades, en especial aquellos que contienen vitamina B1, que puede encontrarse en proteínas como la carne de cerdo u otros víveres como el arroz integral, las espinacas y los champiñones.

¿Cuáles son algunos otros efectos del magnesio en la salud?

Según el portal del National Institutes of Health, estos son algunos efectos que se pueden presentar cuando no se posee la suficiente cantidad de magnesio:

• Presión arterial alta y enfermedad cardíaca: algunos estudios indican que las personas que consumen más magnesio en su dieta tienen un riesgo más bajo de enfermedad cardíaca y derrame cerebral.
• Diabetes de tipo 2: el magnesio ayuda al cuerpo a procesar el azúcar para reducir el riesgo de resistencia a la insulina (un trastorno que lleva a la diabetes).
• Osteoporosis: las personas con mayor ingestión de magnesio poseen una mayor densidad ósea, la cual es importante para reducir el riesgo de fracturas de huesos y de osteoporosis.