Vida Moderna
Colesterol alto: ¿cómo afecta a la memoria y al cerebro?
Los niveles elevados de grasa aumentan el factor de riesgo para el deterioro cognitivo que genera pérdida de memoria y alteraciones en el lenguaje.
Cuando hay niveles altos de colesterol, siempre se encienden las alarmas, pues esta es la puerta para muchos afectaciones en el organismo, como enfermedades coronarias y un ataque cardíaco, además, el cerebro y la memoria también pueden verse perjudicados.
“Los niveles elevados de colesterol están directamente relacionados con el Deterioro Cognitivo Leve (DCL), como la pérdida de memoria, las alteraciones del lenguaje, de la atención e incluso del estado de ánimo en personas de más 50 años”, así lo demostró un estudio del Hospital Clínic de Barcelona/Idibaps, la Fundación Hipercolesterolemia Familiar, la Universidad Internacional de Cataluña y la Universidad Médica de Carolina del Sur.
El citado estudio que fue publicado en el sitio web de The American Journal of Medicine, el cual se realizó durante “cinco años con un grupo de pacientes con hipercolesterolemia familiar, una enfermedad hereditaria que padecen unas 100.000 personas en España y que se caracteriza por un aumento de colesterol LDL en la sangre desde el nacimiento, el comúnmente conocido como colesterol ‘malo’”, resaltó el portal Publicación Médica de Neurología.
“El estudio arrojó que del total de 117 personas mayores de 50 años, 47 con hipercolesterolemia familiar y 70 controles sanos, fueron sometidas a test neuropsicológicos con el fin de valorar el grado de deterioro de las funciones cerebrales superiores”, como el estado cognitivo global, la memoria, el lenguaje, la atención, también se evaluó la habilidad visuoespacial constructiva y ejecutiva y los síntomas depresivos.
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El grupo de especialistas conformado por médicos internistas, endocrinos, de atención primaria, psicólogos y psiquiatras, concluyó: “se confirmó que el aumento de colesterol en pacientes de más de 50 años produce alteraciones de las funciones cerebrales superiores”.
Luego de esta conclusión, los médicos determinaron que es importante la detección temprana del deterioro cognitivo leve, generado por los niveles altos de colesterol. El objetivo es evitar o retrasar el avance de la enfermedad.
“Con este hallazgo se da un paso más en la detección precoz de los DCL, a menudo la antesala de alteraciones como la demencia o la enfermedad de Alzheimer. Obtener indicios de estas enfermedades en una fase inicial puede ser crucial para la eficacia de las nuevas terapias”, así lo destacó Publicación Médica de Neurología.
El presidente de la Fundación de Hipercolesterolemia Familiar, Pedro Mata, comentó sobre el estudio en mención: “todo lo que es malo para el corazón es malo para el cerebro”, en palabras recogidas por el sitio web Médicos y pacientes.
Mata invitó a pensar que factores de riesgo cardiovascular como el tabaco, alcohol, colesterol o azúcar, también se convierten en enemigos que afectarán el cerebro y los procesos cognitivos.
Por su parte, Consumer Healthday señaló que investigadores evaluaron en Francia los datos de casi 3,500 hombres y 1,300 mujeres británicos con una media de edad de 55 años, el cual también arrojó datos importantes para entender cómo el colesterol alto puede generar problemas con el pasar de los años en el cerebro.
“Los que tenían peor salud cardiovascular eran más propensos a tener peores resultados en las pruebas de memoria y capacidad mental que aquellos que tenían mejor salud cardiovascular”, así lo determinó el citado estudio en palabras recogidas por Consumer Healthday.
“Encontramos que el riesgo cardiovascular en la mediana edad se relacionaba con una menor función cognitiva global”, afirmó la coautora del estudio Sara Kaffashian, y añadió: “también observamos una relación entre una peor puntuación cardiovascular y declives globales en la memoria en un período de 10 años”.
El doctor Ralph Sacco, presidente de la American Heart Association, advirtió sobre la importancia de determinar como el colesterol alto se relacione con problemas cerebrales. “Antes creíamos que los factores de riesgo vascular sólo conducían a la demencia vascular, pero ahora sabemos que los factores de riesgo vascular también pueden tener un impacto en la enfermedad de Alzheimer”, dijo.