SALUD
Colesterol alto: este es el fruto que ayuda a reducirlo de forma natural
Estudios científicos respaldan su consumo.
“El colesterol es un tipo de grasa (lípido) que está presente en la sangre”, explica Kaiser Permanente, uno de los principales proveedores de atención médica y planes de salud sin fines de lucro de Estados Unidos. Añade que las células del organismo necesitan colesterol y el cuerpo está en la capacidad de producir todo el colesterol que necesita, aunque también lo puede obtener a través de algunos alimentos.
“Si tiene demasiado colesterol, este empieza a acumularse en las arterias. Esto se llama endurecimiento de las arterias o aterosclerosis. Es el punto de comienzo de algunos problemas del corazón y del flujo sanguíneo”, reseña la entidad norteamericana.
Esta acumulación de colesterol, que se denomina colesterol alto, puede provocar un estrechamiento de las arterias y dificultar el paso de la sangre a través de estos conductos, además de abrir la posibilidad a la formación de coágulos sanguíneos e inflamación “peligrosos que pueden causar ataques al corazón y ataques cerebrales”.
La Fundación Española del Corazón señala que hay dos tipos de lipoproteínas: de baja densidad (LDL) y de alta densidad (HDL). Las primeras tienen la función de transportar nuevo colesterol desde el hígado a todas la células del organismo. En cambio, las lipoproteínas de alta densidad son las encargadas de recoger el colesterol no utilizado y devolverlo al hígado para su almacenamiento o excreción al exterior lo hace a través de la bilis.
La Fundación explica que con base en esta interacción es posible hablar de dos tipos de colesterol: el bueno y el malo. El colesterol es considerado malo cuando se une a la partícula LDL, pues en ese momento se deposita en la pared de las arterias y forma las placas de ateroma. En el caso del segundo es el encargado de transportar el exceso de colesterol de nuevo al hígado para que sea destruido, cuando se une con la partícula HDL.
En palabras de Kaiser Permanente, hay muchos factores que pueden afectar los niveles de colesterol:
- Alimentos que se ingieren: comer demasiadas grasas saturadas y trans puede elevar el colesterol.
- Tener sobrepeso: esto puede reducir el nivel de colesterol HDL (“bueno”).
- No estar activo: no hacer ejercicio puede reducir el nivel de colesterol HDL (“bueno”).
- Edad: el colesterol empieza a aumentar después de los 20 años.
- Antecedentes familiares: si los familiares tienen o tuvieron colesterol alto, es posible que la persona también lo tenga.
Mayo Clinic, una entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, afirma que es poco probable que el colesterol manifieste sintomatología cuando llegue a niveles altos, por lo que la única forma en la que se puede detectar es mediante un examen de sangre.
En los niños y adultos jóvenes que no tienen antecedentes familiares de una enfermedad cardiaca o que no tienen riesgo de padecerla, por lo general se practican pruebas de colesterol entre los 9 y los 11 años, y se repiten entre los 17 y 19. Para el resto de la población que no tiene factores de riesgo de padecer este tipo de enfermedades, las pruebas se realizan cada cinco años.
La alimentación, como en la gran mayoría de los temas relacionados con la salud, juega un papel importante en el manejo del colesterol alto. Si bien hay una serie de alimentos que deben ser evitados, hay otros cuyo consumo puede contribuir al control del nivel del colesterol LDL.
La nuez es un ejemplo. Se trata de un fruto seco que ha sido catalogado como un superalimento debido a sus numerosos aportes para la salud. El consumo de nueces ayuda a reducir los niveles de colesterol en la sangre, mejora la salud del revestimiento de las arterias y reduce el riesgo de tener coágulos sanguíneos.
Un estudio realizado por investigadores de la Facultad de Ciencias de la Familia y del Consumidor (FACS) de la Universidad de Georgia encontró que los participantes con riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares que comieron nueces durante una intervención de ocho semanas mostraron mejoras significativas en el colesterol total, los triglicéridos y la lipoproteína de baja densidad (LDL), o colesterol malo.
Los investigadores observaron un descenso medio del 5 % en el colesterol total y los triglicéridos, y entre el 6 % y el 9 % en el LDL entre los participantes que consumieron el alimento.
Jamie Cooper, profesor del departamento de ciencias de la nutrición de la FACS y uno de los autores del estudio, dijo que tuvieron “algunas personas que realmente pasaron de tener el colesterol alto al inicio del estudio a dejar de estar en esa categoría después de la intervención”.
La Asociación Estadounidense del Corazón hace las siguientes recomendaciones para consumir nueces:
- Comer alrededor de cuatro porciones de nueces sin sal a la semana. Una porción es un puñado pequeño, lo que significa 1,5 onzas (43 g).
- Elegir nueces que estén crudas o tostadas en seco.
- Evitar consumir nueces cocidas en aceite.
- A quienes les gusta mantequilla de nuez, consumir dos cucharadas.