Salud
Aunque el colesterol alto puede heredarse, en la mayoría de los casos es el resultado de una mala alimentación. | Foto: Getty Images/iStockphoto

VIDA MODERNA

Colesterol alto: ingredientes naturales que ayudan a reducir los niveles

Una dieta poco saludable es la principal causa de la hipercolesterolemia

29 de noviembre de 2021

Para mantener un buen estado de salud es necesario tener hábitos saludables, especialmente en la alimentación, pues es uno de los factores vitales para el bienestar del organismo. Tener una dieta equilibrada aporta al organismo los nutrientes necesarios para funcionar óptimamente y protegerlo de las enfermedades. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), “en todo el mundo, las dietas insalubres y la falta de actividad física están entre los principales factores de riesgo para la salud”.

El colesterol alto (hipercolesterolemia) incrementa el riesgo de padecer enfermedades cardíacas, sufrir accidentes cerebrovasculares y desarrollar otras afecciones como la obstrucción en las arterias coronarias y aumentar el riesgo de complicaciones en la salud. “Tener niveles elevados de colesterol total, triglicéridos y/o el colesterol LDL, incrementa el riesgo de padecer un ataque cardíaco”, destaca la Fundación Española del Corazón.

El colesterol es una sustancia cerosa, similar a la grasa, que se encuentra en todas las células del cuerpo humano. El hígado la produce, pero también se encuentra en muchos alimentos. Este tipo de grasa es importante para el funcionamiento óptimo del organismo. Sin embargo, si hay cantidades altas en la sangre puede causar graves afectaciones a la salud.

Aunque el colesterol alto puede heredarse, en la mayoría de los casos es el resultado de una mala alimentación, destaca Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro, dedicada a la práctica clínica, la investigación y la educación. Además de una dieta balanceada, los expertos recomiendan realizar actividad física frecuentemente y, en algunos casos, tomar medicamentos para bajar estos niveles.

Una dieta poco saludable es la principal causa de la hipercolesterolemia, en especial comer demasiada grasa saturada o grasas trans. De acuerdo con la entidad sin ánimo de lucro “las grasas saturadas se encuentran en cortes de carne grasos y productos lácteos no descremados. Las grasas trans por lo general se encuentran en refrigerios empaquetados o postres”.

El Ministerio de Salud de Colombia destaca algunas fuentes de colesterol:

  • Yema de huevo.
  • Hígado de res.
  • Riñones.
  • Piel de las ves.
  • Chicharrón.
  • Salchicha.
  • Jamón.
  • Morcilla.
  • Manteca de cerdo.
  • Chorizo.
  • Quesos cremosos.
  • Crema de leche.
  • Mayonesa.
  • Mantequilla.

El colesterol alto es una enfermedad silenciosa, por lo que no tiene síntomas. Por esto es necesario realizar chequeos médicos periódicamente para verificar que los rangos no estén por fuera de lo normal. En la etapa de la niñez, la primera prueba de sangre de colesterol debe aplicarse entre los 9 y 11 años y, luego, repetirlo cada cinco años. En la etapa adulta, los hombres de entre 45 y 65 años y las mujeres de entre 55 y 65 años deben hacerlo cada 1-2 años y las personas mayores de 65 anualmente. explica el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI, por sus siglas en inglés).

Además de seguir un tratamiento médico, se pueden incluir algunos alimentos que ayudan a disminuir los niveles elevados de colesterol en el torrente sanguíneo. El portal Salud 180 reseña varios:

  • Almendras.
  • Amaranto.
  • Sandía.
  • Soya.
  • Clorofila.
  • Tapioca.
  • Canela.

Estos alimentos se pueden consumir en pequeñas porciones durante el día, como meriendas o pueden ser incluidas en la preparación de comidas, ensaladas, etc.

Prevención

Llevar un estilo de vida saludable es fundamental para regular el colesterol en la sangre. Mayo Clinic señala algunas recomendaciones para prevenir los niveles altos de este tipo de grasa en el torrente sanguíneo y disminuir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares:

  • Tener una dieta baja en sal.
  • Incluir en la dieta equilibrada el consumo de frutas, vegetales y cereales integrales.
  • Evitar el consumo de grasas de origen animal.
  • Consultar al médico para conocer el peso saludable. Bajar de peso o mantenerlo, según sea el caso.
  • Dejar de fumar.
  • Realizar actividad física con frecuencia, todos los días, al menos media hora al día.
  • Limitar el consumo de bebidas alcohólicas.
  • Controlar el estrés.