Vida Moderna
Comer a deshoras: ¿Cuáles son los riesgos para la salud?
Es importante establecer un horario para cada comida, si es posible, con la ayuda de un profesional de la salud.
Para evitar que se desarrolle una gastritis u otro tipo de afección relacionada con la digestión se recomienda establecer horarios para las comidas. Los médicos explican que al regular dichos tiempos una persona puede mantener un peso ideal o reducirlo si así lo prefiere pues cuando se come a deshoras son varios los riesgos y contratiempos para la salud.
Tampoco significa que se deban saltar las comidas principales. Es decir, no comer o no desayunar, sino acomodar un horario pertinente para ingerir los alimentos que deben ser nutritivos, bajos en azúcar y sal y sin grasas saturadas y trans, por ejemplo.
Según el portal Mejor con Salud, cuando se come tarde o a deshoras el cuerpo humano puede sufrir varias afectaciones. Entre ellas se pueden mencionar:
- Presión arterial alta: la Clínica Mayo asegura que es la “fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de sus arterias” y que afecta gravemente el corazón. Los síntomas no los perciben aquellos que la presentan, por lo que se coloca en riesgo la vida de una persona.
- Colesterol: de acuerdo con la Fundación Española del Corazón, el colesterol es una grasa natural que se encuentra en las células del cuerpo, de tal importancia, que colabora en el buen funcionamiento de cada uno de los órganos. Sin embargo, cuando el colesterol LDL se eleva, se acumula en las arterias, con lo que se incrementa el índice de riesgo de enfermedades cardiovasculares.
- Obesidad: la Organización Mundial para la Salud (OMS) define la obesidad como “una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud”, porque puede agravar otras enfermedades subyacentes o incrementar los síntomas de las mismas, como la artritis reumatoide. Mejor con Salud también asegura que comer a deshoras puede afectar el metabolismo.
- Déficit nutricional: esto suele ocurrir cuando no se consumen alimentos ricos en nutrientes, sino los que tienen un bajo valor nutritivo, por lo que no solo es el hecho de comer, sino saberlo hacer, ya que al final del día, el cuerpo solo habrá recibido pocos nutrientes aumentando las probabilidades de desarrollar enfermedades como anemia, por ejemplo.
No obstante, cabe aclarar que existen planes de alimentación que buscan la pérdida de peso, como por ejemplo el ayuno intermitente o la cronodieta, que tienen ciertas condiciones en sus horarios para la ingesta de alimentos. Sin embargo, antes de incluir alguna de ellas a una rutina diaria, es importante consultar con un profesional de la salud, para considerar sus efectos secundarios.
Ayuno intermitente
Es un método que cada vez coge más fuerza entre las personas que buscan perder peso. No obstante, no es recomendado para todo el mundo y debe ser guiado por un nutricionista o experto en la salud.
El ayuno intermitente consiste en restringir la ingesta de comida por un determinado tiempo, por lo que se considera que puede contribuir en la pérdida de peso, como por ejemplo: por ocho horas, una persona debe consumir alimentos. Posteriormente, durante las siguientes 16 horas, debe restringir su ingesta.
Cronodieta
Esta dieta que consiste en el consumo de alimentos antes de que se oculte el sol, ya que interfiere en el metabolismo y el azúcar que transita en la sangre, beneficiando el cuerpo. Lo anterior se explica en la prevención de enfermedades como la diabetes, que consiste en la resistencia de la insulina y/o la no producción del páncreas de ella.
Entre tanto, Mejor con Salud precisa que, aunque se pueden ingerir alimentos antes de que anochezca, esto no quiere decir que se deba hacer, con cualquier tipo de comida, sino con aquella que está incluida en una dieta balanceada y que le aporta cierto beneficio al cuerpo.