¿Comer pan es malo para la salud? Esto dice la ciencia

Como es bien sabido el pan está elaborado con harina de trigo refinada, agua y sal; además, está acompañado por diferentes conservantes, los cuales son añadidos por algunas empresas, llevando así a que este alimento no sea la mejor opción a nivel nutricional.

Asimismo, el portal Mejor con salud manifiesta que su alto contenido en hidratos de carbono no son recomendables para implementarlo en la dieta, debido a que si se consume de una forma regular puede causar enfermedades metabólicas y sobrepeso.

De igual manera, el mencionado portal afirma que el trigo con el que se realiza el pan contiene demasiado gluten, motivo por el cual puede llegar a generar un sistema digestivo sensible. Además, un estudio publicado en Deutsche Medizinische Wochenschrift asegura que causa dolores abdominales, diarrea, reflujo y afecciones inflamatorias.

Según el portal The Objetive, cuando una persona consume en el día tres o más porciones de pan, se genera una respuesta negativa en el organismo porque esto provoca un embudo alimentario que desplaza y elimina elementos con componentes nutritivos. Asimismo, se aumenta el riesgo de sufrir diferentes afecciones cardíacas.

El pan blanco o como popularmente se conoce, de leche, es uno de los que presentan más carga de glucosa y por ende, terminan siendo negativos para la salud de las personas que tienen alguna de la afecciones mencionadas anteriormente.

Del mismo modo, el pan aporta un bajo nivel de fibra, vitaminas y minerales, las cuales son indispensables para el organismo, esto se debe a su alta concentración de almidón.

Además, un estudio publicado en el Journal of clinical Hypertension asegura que el consumo excesivo de sodio puede generar problemas en la salud, sin embargo, lo que llama la atención es que esa cantidad proviene de alimentos procesados, donde está incluido el pan.

De igual manera, es necesario resaltar que algunos tipos de panes son más saludables para el organismo en comparación de otros, y estos son los integrales, dado que, presentan un alto contenido de fibra, y demás nutrientes y minerales.

El alimento que ayuda a regular el azúcar

Existen algunos productos naturales que por sus propiedades pueden ayudar a regular el azúcar. Uno de ellos es la cúrcuma, cuyo principal compuesto activo es la curcumina y es al que se le atribuyen casi todas las bondades medicinales de la especia. Es antioxidante, antiinflamatorio, anticancerígeno, antibacteriano y antiviral.

El portal Diabetes Self Management asegura que un artículo científico de la Universidad de Medicina China de Beijing, junto con la Universidad McGill, de Montreal, revisó diversos estudios sobre la curcumina, los cuales han sido desarrollados en ratas y ratones. Encontró que en muchas de esas investigaciones este componente redujo el nivel de azúcar y colesterol en la sangre.

Adicionalmente, algunos de esos estudios concluyen que la curcumina mejora la función de la insulina, la hormona que se encarga de regular el azúcar, al permitir el paso de la glucosa de la sangre a las células, en donde se convierte en energía.

El mencionado sitio web cita otro estudio en el que participaron 240 personas y que se realizó en Tailandia. Esta investigación encontró que la curcumina evitó que la prediabetes progresara para convertirse en diabetes. “Aproximadamente el 16 % de las 116 personas que recibieron placebo (tratamiento inactivo) progresaron a diabetes tipo 2 en diez meses. Nadie en el grupo que recibió 250 miligramos diarios de “curcuminoides” progresó”, precisa.

Frente al tema, el portal Revista Médica indica que “hallazgos preclínicos y clínicos han revelado que la curcumina tiene efectos beneficiosos sobre la resistencia a la insulina, la hiperglucemia, la obesidad y las enfermedades metabólicas relacionadas con la obesidad, mejorando la sensibilidad a la insulina, previniendo el desarrollo de la diabetes y atenuando el aumento de peso corporal”.