Vida Moderna

¿Cómo ayuda el consumo frecuente de café a proteger cerebro?

La ingesta recomendada para adultos es de 400 mg de cafeína al día.

11 de mayo de 2023
Taza de café
El café es rico en antioxidantes. | Foto: Getty Images/iStockphoto

El café es una bebida rica en ácido clorogénico, ácido cafeico y kahweol, que son compuestos bioactivos con propiedades antioxidantes, de acuerdo con el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde.

Además, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos señaló que la cafeína es una sustancia amarga que se encuentra naturalmente en más de 60 plantas, incluyendo:

  • Granos de café.
  • Hojas de té.
Cabe resaltar que el consumo de cualquier alimento o bebida en exceso es malo. Por eso, es importante conocer los límites para el consumo del café.
Algunos estudios demuestran que el consumo de café favorece la pérdida de peso. | Foto: Getty Images
  • Nueces de cola, que se usan para el sabor de las bebidas de cola.
  • Vainas de cacao, que se utilizan para hacer productos de chocolate.

Asimismo, indicó que las cantidades de cafeína en diferentes bebidas pueden variar mucho, pero generalmente contienen:

  • Una taza de café de ocho onzas: 95-200 mg.
  • Una lata de bebida cola de 12 onzas: 35-45 mg.
  • Una bebida energética de ocho onzas: 70-100 mg.
  • Una taza de té de ocho onzas: 14-60 mg.
Café
Los expertos recomiendan tomar en promedio de tres a cuatro tazas de café al día. | Foto: Getty Images

Ahora bien, su consumo moderado, que es hasta 400 miligramos (mg) de cafeína al día, tiene varios beneficios para la salud y para el cerebro.

“Por ser rico en cafeína, un compuesto estimulante del sistema nervioso central, el café ayuda a mejorar la memoria y el estado de alerta, además de aumentar la capacidad de concentración y disminuir el sueño”, explicó el portal portugués.

Asimismo, añadió que “el café ayuda a disminuir y a prevenir el dolor de cabeza, debido a que produce vasoconstricción de las arterias del cerebro, evitando que surja el dolor. Algunos estudios indican que la dosis terapéutica en estos casos debe ser de por lo menos 100 mg al día”.

El café y su relación con el cerebro.
El café ayuda a disminuir y a prevenir el dolor de cabeza. | Foto: Boy_Anupong/Getty Images

Entretanto, en términos de pureza, la recomendación es consumir café en granos o molido, dado que, a diferencia del café instantáneo, este no ha sido sometido a ningún proceso industrial que altere sus componentes aromáticos y nutricionales. Además, tampoco lo mezclan con otro tipo de café de menor calidad con el objetivo de generar más demanda debido a su precio.

No obstante, el café tiene efectos secundarios y, de acuerdo con la biblioteca de Estados Unidos, son:

  • Inquietud y temblores.
  • Insomnio.
  • Dolores de cabeza.
  • Mareos.
  • Ritmo cardíaco rápido.
  • Deshidratación.
  • Ansiedad.
  • Dependencia, por lo que necesita tomar más de ella para obtener el mismo efecto.

Entretanto, es importante señalar que hay que limitar o evitar la cafeína si:

  • Se está en embarazo, ya que la cafeína pasa a través de la placenta al bebé.
  • Se está amamantando, ya que incluso una pequeña cantidad de cafeína que consuma pasa al bebé.
  • Se tienen problemas del sueño, incluyendo insomnio.
  • Se tienen migrañas u otros dolores de cabeza crónicos.
  • Se tiene ansiedad.
  • Se tiene reflujo gastroesofágico o úlcera.
  • Se tiene arritmia (un problema con los latidos o el ritmo de los latidos del corazón).
  • Se tiene presión arterial alta.
  • Se toman ciertos medicamentos o suplementos, incluyendo estimulantes, ciertos antibióticos, medicamentos para el asma y medicamentos para el corazón
  • Se es un niño o adolescente.

Por su parte, la biblioteca de Estados Unidos señaló que la cafeína alcanza su nivel máximo en la sangre una hora después de consumirla y no se acumula en el torrente sanguíneo ni se almacena en el organismo, pues esta sale del cuerpo en la orina muchas horas después de haber sido consumida.

De todos modos, antes de consumir algún alimento o eliminarlo de la dieta, lo primero que se debe hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista, para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.