AUTOMÓVIL
¿Cómo cambiar la llanta de un carro? Estos son algunos consejos
La llanta de repuesto se debe cargar en el carro siempre, en caso de cualquier imprevisto.
Cambiar la llanta de un carro puede parecer fácil para algunos y difícil para otros, pero independientemente de la complejidad que el proceso implique, lo que realmente importa es que se haga bien: sin poner en riesgo la vida de los pasajeros del automóvil o el vehículo en sí por un daño de la carrocería, el motor, etc.
Para comenzar, es preciso enumerar cuáles son las herramientas que se necesitan para cambiar el neumático de un carro de la forma correcta. Se trata de algunos elementos que, por ley, se deben tener en el baúl ante cualquier imprevisto. Estos son exigidos por el kit o equipo de carretera reglamentario en Colombia, según el Artículo 30 del Código Nacional de Tránsito (Ley 769 de 2002).
- Gato hidráulico: Esta es una herramienta que ayuda a elevar cosas pesadas, en este caso el carro, para permitir que la persona tenga un mayor margen de maniobra a la hora de cambiar la llanta. No está de sobra mencionar que se debe leer muy bien el manual que viene en el empaque de este producto para saber sobre el uso correcto del mismo y el lugar donde debe ser colocado para que preste su función.
- Triángulos de señalización: Se trata de unos triángulos de señalización fotoluminicentes que se ayudan a indicar que el carro esta detenido por algún motivo.
- Llave de cruz o cruceta: Esta herramienta ayuda a aflojar o ajustar los birlos –tornillos– que sujetan a la llanta del carro, estas vienen con diferentes diseños en sus extremidades que se ajustan al tamaño de los tornillos del vehículo.
- Llanta de repuesto: Es una llanta que se debe cargar en el carro siempre, en caso de cualquier imprevisto. Este neumático debe estar en perfectas condiciones y, de ser posible, nuevo.
Pasos a seguir
El blog de Ford México reseña el paso a paso para cambiar la llanta de un carro sin complicaciones, descrito a continuación:
1. En primer lugar, se debe buscar un lugar seguro para orillar el carro, para luego colocar las luces estacionarias, ponerlo en modo neutro, apagar el carro y activar el freno de mano.
2. Se procede a poner los triángulos de emergencia a una distancia prudente del carro y que sirva de señal para que los demás vehículos sepan que el automóvil está detenido.
4. El paso a seguir es aflojar los tornillos que tiene la llanta. “Con el vehículo aún sin ser colocado en el gato hidráulico, comienza por el birlo de seguridad (en caso de contar con él)”, dice Ford. Para poder aflojar cada uno de ellos, se debe girar la cruceta en sentido contrario a las manecillas del reloj, sin sacarlos por completo.
5. Es hora de colocar el gato hidráulico debajo del carro, este se inserta en la ranura para poder levantarlo. La mayoría de los autos tienen dos ranuras: una en la parte frontal, en todo el frente a las llantas delanteras y otra detrás de las llantas traseras, pero varía según el carro. Es preciso consultar dónde están ubicadas con antelación. “Nunca se sitúe debajo de su vehículo si el gato hidráulico no está colocado de manera correcta”, advierte la compañía automotriz.
6. Una vez el gato hidráulico se haya puesto de forma segura, se empieza a girar la manivela de esta herramienta en el sentido de las manecillas del reloj para elevar el carro entre 10 y 15 centímetros del piso. Esta altura permitirá cambiar la llanta sin problema.
7. Estando en esa posición, se retira la llanta quitando por completo los birlos que ya están flojos desde el paso cuatro. Se debe tomar la llanta y jalarla hacia afuera, para colocarla debajo del automóvil. Este último es un consejo que dan los conocedores en la materia para prevenir la caída del carro en caso tal de que el gato hidráulico falle.
8. Surtido este proceso, se toma la llanta de repuesto y se sitúa en reemplazo de la otra. Se insertan los orificios del rin en los tornillos de los birlos, para luego apretar los tornillos con la ayuda de las manos.
9. Luego se debe bajar el vehículo con la ayuda del gato hidráulico, girando la manivela en el sentido contrario de las manecillas del reloj. Hecho esto, se retiran tanto el gato como la llanta que se cambió.
10. El paso a seguir es ajustar muy bien los birlos, girando la llave de cruz en el mismo sentido que las manecillas del reloj hasta que queden bien apretados. el tornillo de seguridad es el último que se debe apretar.
11. Luego, se procede a guardar la llanta cambiada y las herramientas que se utilizaron en el baúl. “Al continuar el viaje, recuerda circular a una velocidad moderada, ya que algunos neumáticos de refacción son de menor tamaño y más delgados”, advierte Ford.