¿Cómo desinflamar las venas várices con tomate?

Las venas varicosas, mejor conocidas como várices, son venas hinchadas, retorcidas y dilatadas que se pueden ver bajo la piel. Dolor, hinchazón y sensación de cansancio en las piernas son algunos de los síntomas que genera este padecimiento.

Con frecuencia las várices, son de color rojo o azul y generalmente aparecen en las piernas, aunque cualquier vena superficial puede tomar este aspecto. Estas son una afección frecuente que se ocasiona por la debilidad o daño de paredes en las venas y válvulas.

Generalmente, aparecen en las piernas, sin embargo, según Medline Plus, sitio wen de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, este padecimiento puede presentarse en otras partes del cuerpo como en los testículos o en el esófago.

Así mismo, las venas várices son un padecimiento que afecta principalmente a las mujeres, pero que también puede impactar a los hombres mayores de 50 años. De igual forma, esta afección puede ocurrir debido al embarazo, estreñimiento, un tumor, o sobrepeso y obesidad.

Según el Instituto Nacional del Corazón, Pulmón y Sangre de Estados Unidos, si no se genera el tratamiento correcto puede empeorar el flujo de sangre y presentarse problemas como hinchazón, dolor constante, coágulos sanguíneos y cambios en la piel.

Actualmente, existen múltiples formas de aminorar los síntomas de las várices o mejorar su apariencia. De hecho, la revista UnCOMO, publicada a través del portal Mundo Deportivo, explicó que el consumo de tomate puede ayudar con este propósito.

El medio informa que este ingrediente cuenta con Ixocarpalactone-A, un antioxidante que contribuye a aminorar el estrés oxidativo y la inflamación. Además, está compuesto por vitamina A, por lo que favorece el cuidado de la piel y el sistema inmunológico.

Para aprovechar las propiedades mencionadas del tomate se puede preparar un jugo siguiendo este procedimiento:

1. Pelar los tomates que se deseen para usarlos sin cáscara y picarlos en trozos.

2. Llevar los trozos a la licuadora y procesar hasta obtener una consistencia líquida pero densa.

3. Si se desea, se puede agregar un poco de agua para que se torne más líquido.

4. Consumir un vaso de jugo de tomate en ayunas y otro antes de la última comida del día.

El portal Mejor con salud explicó otra forma de aprovechar el tomate para aminorar las venas várices. Para elaborarlo es importante tener en cuenta si la piel es sensible. Si lo es, es necesario combinar la preparación con partes iguales de agua para que no se vea afectada esa zona.

Los ingredientes para la mezcla son: cinco tomates verdes y una taza de vinagre de manzana orgánico.

Realización:

1. Se deben cortar los tomates verdes en rodajas e introducirlas en un frasco de vidrio.

2. Cubrir los trozos con el vinagre de manzana orgánico y sellarlo durante 48 horas en un lugar fresco y oscuro para asegurar mayor concentración del producto.

3. Al pasar el tiempo, tomar varias rodajas de tomate del frasco y ponerlas directamente sobre la zona afectada por las venas várices.

4. Tapar completamente el área con una venda o una gasa para mantener el tomate en el lugar correcto.

5. Después de 40 minutos, enjuagar con agua fría.

6. Para sentir mejoría es posible repetir el procedimiento a diario durante dos semanas.

Cabe resaltar que el uso del tomate para las várices debe ser consultado con un especialista de la salud para evitar agravar la afección o causar irritaciones en la piel.