¿Cómo detectar la depresión en los perros? Estos son los síntomas

La salud de las mascotas es una prioridad en los hogares. Mantenerlas en estado óptimo no suele ser una tarea fácil; sin embargo, es necesario para brindarles a los animales una buena calidad de vida.

Tal y como sucede con los humanos, los perros afrontan problemas de salud física y mental. Estas dependen mucho de herencia genética y la nutrición, así como de las tensiones que haya sufrido en su vida.

Es importante estar atentos a las señales que pueden evidenciar enfermedades o molestias en estos fieles compañeros. Por ejemplo, los perros pueden sufrir de depresión derivada de altas dosis de estrés y ansiedad.

De hecho, la revista UnComo explicó que es importante estar atentos a los síntomas de la depresión canina para combatirla a tiempo y lograr devolver la felicidad al perro. Para saber si la mascota tiene depresión se deben tener en cuenta lo siguiente:

1. Existen algunas razas que son más propensas a sufrir depresión. Una de estas son los Terrier, pues su carácter y personalidad los hace inclinarse a dicha afección. Así mismo, un perro que proveniente de una perrera o un lugar volátil puede presentar los síntomas de esta enfermedad.

2. Si el perro muestra falta de actividad y ya no desea interactuar con otros perros, puede ser depresión pues pierden entusiasmo y no desean socializar o jugar. También se muestran apáticos hacia los cariños humanos.

3. Si después de ser un perro enérgico, ya no desea correr y su caminar es lento, podría tratarse de depresión. Al salir, los canes suelen saltar y correr, por lo que si ocurre lo contrario es una señal de alerta.

4. Al presentarse cambios de apetito, pérdidas considerables de peso o aumentos sustanciales del mismo, se puede estar hablando de depresión. Es necesario observar con detenimiento si las cantidades de comida ingerida han variado.

5. Uno de los síntomas comunes de esta afección en un can se da cuando duermen más de lo que deben. “Es posible, incluso, que ocupe gran parte de su día durmiendo y bebiendo agua. Sin embargo, igual que ocurre con los cambios alimentarios, algunos perros presentan síntomas contrarios, es decir, no pueden conciliar el sueño”, explica UnComo.

6. Si el perro llora o gime con frecuencia sin un motivo aparente puede presentar depresión. Suele ser una forma de pedir ayuda a su dueño y conseguir atención. Otros cambios de comportamiento es mantenerse escondido, una acción que no suele ser frecuente en ellos.

Al ver alguno de los síntomas mencionados, o cambios en el perro de actitudes que antes no tenía, lo mejor es acudir al veterinario para que lo examine e inicie el tratamiento necesario.

Además, no todos los síntomas son exclusivos de la depresión, en ocasiones puede deberse a otro problema de salud o una dolencia física del animal. Por ello, solo un profesional puede determinar lo que realmente le ocurre a la mascota.

Cabe resaltar que diversos estudios han demostrado que la presencia de perros, gatos y otros animales de compañía puede ser determinante en el estado de ánimo del ser humano. “Interactuar con nuestra mascota provoca la liberación de oxitocina, la conocida hormona del amor, generando en nosotros sentimientos como alegría y confianza”, explica la psicóloga Vanessa Moreno.

No obstante, los beneficios no solamente son emocionales. Tener una mascota puede ayudar a prevenir dolencias físicas como ataques cardíacos, pues al pasearlas varias veces al día las personas están haciendo un ejercicio que los deja menos propensos a sufrir de enfermedades cardiovasculares.

Otro beneficiado por la presencia de las mascotas en la casa es el sistema inmunológico, en especial el de los niños, en quienes se fortalece haciendo que se reduzca el riesgo de desarrollar alergias y fortalece al cuerpo para combatir otros virus.