¿Cómo dormir mal puede aumentar el riesgo de padecer enfermedades cardíacas?

Instituciones como la Asociación Estadounidense del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés) advierten que hay una relación entre las horas de sueño y las enfermedades del corazón. De acuerdo con estimaciones del gremio norteamericano, para mantener niveles óptimos cardiacos es necesario descansar adecuadamente.

Hace más de una década, los preservadores de la salud habían dado a conocer siete “medidas clave para mejorar y mantener la salud cardiovascular”, ahora la AHA incorporó una acción más y es tener una buena noche a través de un sueño efectivo.

En vista de lo anterior, la mencionada asociación, enfocada en el estudio y mejoras para el corazón, indica que las nuevas medidas deberían tenerse en cuenta, pues “una mejor salud cardiovascular ayuda a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y otros problemas de salud importantes”, consignan.

Aparte de un buen sueño, los factores restantes que comparte la Asociación Estadounidense del Corazón para prevenir el riesgo de afecciones cardiovasculares son: dieta equilibrada, la actividad física, evitar la exposición a la nicotina, mantener un peso adecuado, valores correctos de colesterol, niveles estables de azúcar en la sangre y la presión arterial. Por último, como nuevo aporte, la calidad del sueño.

En cuanto a la necesaria acción de dormir, la AHA determina que el número de horas más aconsejables para obtener un sueño saludable es entre siete a nueve horas máximo. De hecho, apuntan que la calidad del sueño es un “problema moderno”.

Para el máximo referente científico en materia de estudios cardiológicos, de los Estados Unidos, tener un sueño de calidad, con las horas adecuadas y sin ninguna distracción “podría ser la clave para desbloquear una vida más saludable”.

“La cantidad y la calidad del sueño pueden influir en los hábitos alimenticios, estado de ánimo, memoria, órganos internos y más”, como la mejora y prevención de enfermedades del corazón, agregan.

Los especialistas de la AHA comparten una serie de recomendaciones para planificar un buen sueño, antes de ir a la cama:

• Configurar la alarma, no para despertarse, sino para ir a dormir.
• Dedicar 15 minutos para pensar en lo que se hará el día siguiente, esto se podría implementar por medio de la escritura de una lista de tareas.
• Tratar el estrés, se podría realizar meditación antes de dormir.
• Leer “es una excelente manera de relajar el cerebro y conciliar el sueño”, detallan.
• Evitar las pantallas, es decir, el contacto con la luz brillante del televisor, teléfono celular, computador o cualquier dispositivo digital.
• No acostarse si hay inquietud de por medio, tratar de hacer algo para calmar los nervios como masajes de relajación.

La mejor y la peor postura para dormir

La postura al dormir no solo afecta la sensación de bienestar al despertarse por la mañana, también puede aumentar o disminuir el riesgo de sufrir ciertas enfermedades, entre ellas, un dolor de espalda y de cuello, calambres musculares, cansancio y apneas del sueño.

Estudios científicos han demostrado que ocho de cada diez personas en el mundo tendrá dolor de espalda alguna vez en la vida. Además, puede ser causado por hernias que se localicen principalmente en zonas móviles de la columna, como las cervicales y las lumbares, según el Hospital Universitario Clinic Barcelona.

Por esta razón, dormir bien cuando se tiene este tipo de aflicción es difícil para muchas personas. Muchas veces al llegar a casa, tras un día largo de trabajo, la mayoría realiza gestos cotidianos que pueden empeorarlo.

Juan Pareja Grande, responsable de la Unidad del Sueño del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, considera que determinadas posiciones ayudan a conciliar mejor el sueño. “Las más recomendables son decúbitos laterales (de lado izquierdo o derecho) y la que menos, decúbito prono (boca abajo)”, dice Pareja.