Vida Moderna

¿Cómo eliminar joroba y mejorar postura mientras se duerme?

Si el dolor es intenso o comienza a salir una protuberancia en la espalda, se debe consultar con un especialista que recete el tratamiento adecuado.

5 de abril de 2022
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La altura de la almohada juega un papel importante para que no se vea afectado el cuello mientras se duerme. | Foto: Getty Images

Mantener una buena postura es fundamental no solo para dar una buena imagen, sino también para evitar problemas en la columna, fuertes dolores de espalda y algunas otras afecciones respiratorias y musculares.

La joroba o giba es resultado de la mala postura de la columna vertebral al sentarse, al estar acostados y caminar, por lo cual se recomiendan algunos ejercicios y posiciones para corregir ese defecto que con el tiempo será más complicado de solucionar.

Por lo anterior, la revista digital UnComo a través del portal Mundodeportivo, listó algunos consejos que ayudan a corregir la hipercifosis dorsal, más conocida como joroba, mientras se duerme:

1. Elegir un buen colchón y una almohada adecuada aseguran un descanso reparador y bienestar durante el sueño. Además, ambos son importantes para que la columna vertebral esté alineada y se prevengan las dolencias articulares.

2. Al quedarse dormido se debe evitar que sea en el sofá o en un lugar en el que no sea posible adoptar la postura correcta. En el momento en que se sienta sueño, se recomienda dirigirse a la cama y adoptar las posiciones adecuadas.

3. Una de las mejores posturas para descansar es dormir de lado o en posición fetal. “Las rodillas y las caderas deben quedar ligeramente flexionadas sin sobrepasar un ángulo de 90º”, explica UnComo. Se aconseja colocar una almohada entre las piernas para mantener alineada la columna y las caderas.

4. Si con la anterior posición no se suele sentir comodidad, también es posible acostarse boca arriba. En este caso, la almohada debe ir debajo de las rodillas y con los brazos extendidos a los lados del cuerpo. Una de las claves de esta postura es la almohada que soporta la cabeza, ya que, si no tiene la altura adecuada, puede acarrear problemas cervicales.

5. Se debe evitar dormir boca abajo. Esta pose hace que a largo plazo aumente la curvatura de la columna, lo que provoca dolores en la espalda y el cuello.

Además de los consejos anteriores, es posible realizar algunos ejercicios que aminoran y mejorar la postura. El portal Fisioonline listó algunos de ellos:

1. Es necesario acostarse sobre una superficie plana elevada, después se debe dejar caer un brazo por fuera de la superficie y girar el cuello al lado contrario. Se debe sentir como se estira el pecho y el hombro. Repetir el proceso con el brazo contrario.

2. Para este movimiento hay que recostar la mitad de la espalda sobre una superficie elevada, dejando el resto del cuerpo por fuera. Sujetar el área plana con las manos, respirar profundo y dejar caer el cuerpo. La espalda se enderezará y los pectorales se estirarán.

3. Con este ejercicio también se podrán estirar los músculos presentes en los pectorales. Para realizarlo se necesita una vara –del largo de una escoba–, que debe colocar detrás de la espalda para mantener una posición erguida, y luego, si es posible, llevar las hombros hacia atrás.

4. En esta ocasión hay que acostarse boca arriba en el suelo y apoyar las piernas sobre una pared que esté cerca. Cuando se sienta la tensión, deben ponerse las puntas de los pies hacia abajo y estirar los brazos hacia atrás.

También se deben tener en cuenta algunos hábitos para corregir la postura de la espalda, según explica el sitio especializado Mejor con Salud:

  • Cuando se permanece mucho tiempo sentado, es importante realizar constantemente ejercicios de estiramiento. De este modo, además de evitar que la espalda se encorve, también se podrá evitar contracturas por falta de movilidad.
  • Por el contrario, quienes permanecen mucho tiempo de pie, deben intentar mantener bien erguida la espalda.
  • Al caminar, se debe procurar mantener la cintura, la espalda y el cuello alineados, dar pasos, ni muy largos ni muy cortos, e intentar acompasar los movimientos, es decir, mover al mismo tiempo el brazo derecho y el pie izquierdo, y viceversa.