Vida moderna
¿Cómo llevar una vida saludable después de los 40 años?
Consejos de nutrición para lucir de diez años menos.
Uno de los dilemas más importantes de hombres y mujeres es cómo se deben cuidar después de determinada edad. Entre las preocupaciones más comunes están qué comer, cómo vestirse, qué ejercicio es más conveniente o incluso temas relacionados con el amor. ¿Pero por qué cuestionarse tanto?
Cómo dijo Carrie Bradshaw, en el episodio uno de Sex and the City: “Bienvenida a la era de la pérdida de la inocencia, nadie desayuna con diamantes y nadie vive romances inolvidables. Más bien desayunamos a las siete de la mañana y tenemos líos que procuramos olvidar cuanto antes”.
Si las personas están por entrar al cuarto piso o ya están viviendo esta etapa de la adultez, no hay de qué preocuparse. Los 40, para muchos, son los nuevos 30. En dicha edad lo más importante parece ser informarse sobre qué contienen los alimentos para realmente entender cómo podría afectar o no el organismo.
Por otro lado, el portal Family Doctor afirma que las mujeres pierden aproximadamente media libra de músculo por año a partir de los 40 años. Eso hace que perder peso sea aún más difícil. Algunos de los cambios que experimentan las mujeres se deben a la disminución de las hormonas, la reducción del nivel de actividad y las condiciones médicas.
Tendencias
Un estudio realizado por el Instituto de Nutrición y Salud de Kellogg’s, afirma que a la edad de los 40 se debe tener un equilibrio entre las calorías ingeridas y las que se gastan. Por eso, el hábito de la actividad física es un factor indiscutible y necesario. Además de favorecer a mantener el peso, el ejercicio mejora la salud ósea, la cual ayuda a prevenir la osteoporosis y otras enfermedades como la intolerancia a la glucosa.
Cabe resaltar que conforme pasa el tiempo el cuerpo sufre algunos cambios inevitables; sin embargo, cuando se enfoca en una vida más saludable, puede desarrollar una condición óptima que le permite vivir al máximo cada momento.
Por esta razón, una dieta balanceada y hacer ejercicio es la mejor combinación que estabiliza los nutrientes en la alimentación y le puede brindar esa milla extra que se necesita a los 40.
Aquí algunos consejos nutricionales que serán excelentes aliados en todo el proceso para revivir la juventud:
Hacer ejercicios que fortalezcan y relajen
Hacer actividad física es fundamental, con el paso del tiempo los huesos se debilitan y necesitan el fortalecimiento de los músculos para contrarrestar. Por esta razón, es recomendable realizar ejercicios que ayuden a la elasticidad, el equilibrio, la respiración, la relajación y la fuerza del cuerpo. Después de los 40 años lo mejor es realizar actividades como la natación, el yoga o el tai chi.
Consumir vitaminas del grupo B
Las vitaminas B1, B2, B3 y B6 ayudan en el correcto funcionamiento de todo el organismo, ya que producen anticuerpos en el sistema inmunológico y conservan al sistema nervioso en perfecto estado. Además esto se puede ver reflejado en la buena memoria y en su capacidad para prevenir enfermedades; entre los alimentos se encuentran en algunas legumbres, almendras, avena, trigo, carnes o plátanos.
Omega 3
El omega 3 es un tipo de grasa natural que ayuda a mantener los niveles normales de colesterol y las funciones cerebrales, la deficiencia de este nutriente está asociada a la pérdida de memoria en los adultos mayores, así como en la depresión. Por eso, es muy importante consumir alimentos que contengan omega 3, ya que ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares y cerebrales, entre ellos están: los pistachos, las semillas, las nueces y el salmón.
Aumentar el consumo de lácteos
Los productos hechos a base de leche le hacen muy bien a la vida adulta para los huesos y los ligamentos. Estos necesitan más calcio al pasar el tiempo. Por eso, es fundamental consumir lácteos o legumbres. Serán un compañero fiel para esta edad.
Antioxidantes
Una de las preocupaciones en la edad de los 40, es tener una piel tan radiante como las jovencitas de 25. Por eso, se deben consumir antioxidantes, ya que ayudan a ralentizar el envejecimiento de las células y a renovar el físico. Entre los alimentos ricos en antioxidantes están: los frutos rojos, y los frutos secos.